Natera echa un pulso al pleno con el Sábado Santo

El obispo fue tajante. No habrá procesiones en Sábado Santo, al menos no en el formato vespertino al que estamos acostumbrados. Así lo declaró, tras tender la mano a los cofrades de la Piedad en su eterna reivindicación de abandonar el Viernes Santo. Sin embargo, la cuestión está enquistándose, ya que en el último pleno de hermanos mayores, en el turno de ruegos y preguntas, el hermano mayor de la Piedad volvió de nuevo a solicitar que fuera la Unión de Hermandades la que solicitara al prelado la posibilidad de cambiar de día y hora su estación de penitencia, algo que no se contempla en el equipo de la calle Curtidores.

Así las cosas, serán los propios hermanos mayores los que soliciten en breves fechas un pleno extraordinario en el que el único punto del orden del día sea un análisis profundo de las posibilidades reales de la celebración de procesiones en el Sábado Santo de nuestra ciudad, una circunstancia que se derogó en el año 1984 por el obispo Rafael Bellido Caro. La normativa obliga a que sean 14 los hermanos mayores que firmen esa solicitud, aunque las previsiones actuales es que la mayoría de hermanos mayores de la ciudad solicitarán al Consejo la celebración del pleno extraordinario para poder, al menos, discutir las posibilidades reales de esta petición.

El presidente del Consejo Local de Hermandades y Cofradías se ha mostrado abierto a la celebración de este pleno extraordinario, si bien ha sido meridianamente claro, en declaraciones realizadas al programa de cofradías de Una Televisión: «Si se aprobase por parte del prelado la celebración de una Sabado Santo por la tarde, la Piedad no sería la única que haría su estación de penitencia a la Catedral en esa jornada de la Semana Santa. Sería un Sábado Santo acorde con Jerez y su Semana Santa, con cuatro cofradías en la calle».

Así las cosas, Manuel Muñoz Natera ha colocado de nuevo el problema en el tejado de los hermanos mayores de manera sorpresiva. En caso de que se apruebe el Sábado Santo, otras tres cofradías, y de las que ya hacen estación de penitencia a la Catedral, tendrán que cambiar de día. Y será «por consenso o por decreto, pero será». Y las posibilidades son claras: Angustias, Santa Marta y Consuelo.