El Ayuntamiento no incrementará la presión fiscal en las próximas ordenanzas

El gobierno municipal está cerrando el estudio de la propuesta de ordenanzas fiscales para 2011, que de forma general mantiene el principio establecido en esta legislatura de no aumentar la presión fiscal.

Con esa perspectiva, se está analizando una subida en tasas e impuestos exclusivamente del IPC, tomando como referencia el que se publica a primeros de octubre. Particularmente, en el caso del IBI se estudia bajar el tipo con el objetivo de que no repercuta en los ciudadanos el aumento de los valores catastrales, sin que al mismo tiempo provoque una bajada en los ingresos municipales.

Otro dato destacado en el análisis es llevar a cabo una subida cero en el impuesto de vehículos, donde no se aplicaría el índice del IPC. El gobierno pone de manifiesto que con estas propuestas, que aún están en estudio, sigue en sus principios fiscales para la ciudad, que se han venido aplicando a lo largo de esta legislatura para lo que se han usado todas las vías a fin de cumplir este objetivo, sobre todo en tiempos de crisis.

Las ordenanzas fiscales para 2011 irán al Pleno del mes de octubre y en unos días se ultimarán los estudios técnicos para seguidamente darlos a conocer a la ciudadanía.

La alcaldesa aseguró recientemente que, «en contra de lo que sostienen algunos, este Ayuntamiento no tiene ningún afán recaudatorio más allá, lógicamente, de lo que significa velar por el cumplimiento de las obligaciones fiscales para garantizar la prestación de los servicios públicos».

De ahí, insistió, que se haya «bonificado fuertemente el IBI durante tres años y ahora se proponga bajar el tipo». En este mismo sentido, añadió que se mantendrán todas las bonificaciones fiscales aprobadas en el presente mandato: «Esperamos que beneficien a personas con especiales dificultades económicas, como familias numerosas».