La Feria se abre de par en par a la Bahía

La Feria abrió ayer sus puertas para el resto de la Bahía. Jornada multitudinaria y repleta de jóvenes que no dudaron en concentrarse en las inmediaciones del paseo de La Magdalena para realizar el acostumbrado botellón en las proximidades del caño de Sancti Petri, antes de entrar en las casetas de movida, que no comenzaron a llenarse hasta pasadas las dos y media de la madrugada. En ese momento resultaba complicado encontrar un hueco en alguna de las instalaciones y las colas eran la nota predominante de las calles del recinto ferial.

Horas antes, el ambiente era bien distinto. Las familias se concentraban entre la zona de las atracciones y las casetas más tradicionales. Por todo ello resultaba complicado caminar por el lugar o encontrar un hueco en el que poder descansar. En las atracciones la estampa era similar con esperas tanto para comprar entradas como para montarse en algunos de los 'cacharros'.

Una de las críticas que ha vuelto a repetirse en la presente edición de la Feria del Carmen y de la Sal, ha sido la de la falta de un día del niño en la que la diversión salga a mitad de precio. De hecho, el elevado coste y la precaria situación económica que se traviesa actualmente, ha provocado que muchas familias hayan decidido racionar más los días en los que acuden al recinto de La Magdalena.

«Si tienes dos o tres hijos puede salirte todo más de 70 euros y ese gasto no se soporta los seis días. Y si no gastas no tiene sentido venir porque dile a los niños que no pueden montarse en algún 'cacharrito' o no le compres una chuchería. Además, si quieres aprovechar más el tiempo vienes a cenar. Total que sale todo demasiado caro», afirmó Paloma Reyes.

La mayoría de tickets en las atracciones no bajan de los tres euros, aunque a la hora de la comida sí hay una amplia variedad de ofertas. Pero, por muchos esfuerzos que se hagan y por más que se aprieten los puños dentro del bolsillo de los pantalones o del bolso, la suma final a la hora de emprender el camino de vuelta siempre entra en números rojos.

«Hemos venido menos días que en otros años y hoy hemos decidido venir un poco antes para irnos antes de que sea imposible caminar por la feria», según confiesa Miguel Martínez.

Pero por mucho que las familias adelanten su hora de llegada a la Feria lo cierto es que nunca lo hacen con el sol en lo más alto. «Tenemos la playa al lado, así que como no se lleven la Feria a Camposoto me parece que va a ser muy complicado que consigan llenar el recinto durante el día», opina Raquel Heredia. Como suele ser habitual, la jornada de la mañana estuvo marcada por la ausencia de actividades y ambiente en La Magdalena. Hoy habrá diferentes concursos de enganches a cargo de la asociación Hípica La Isla.

La noche más larga

Los que seguramente no presenciarán ese concurso serán los miles de jóvenes que ayer decidieron vivir la noche más larga de toda la Feria que terminaba con el sol apareciendo de nuevo en el cielo. El caño volvió a sentir los estragos de una jornada basada en la diversión con un ojo puesto en la economía. «Dentro de las casetas beber te cuesta más que un riñón. Por eso tiene tanto éxito esta sana costumbre de reunirse con los colegas para ponerse a punto de forma barata antes de bailar», expuso José Luis Hernández. Encuentros, ganas de pasarlo bien y de ligar. Las escenas en el paseo de La Magdalena transcurrían entre una amplia oferta de gorros, rosas, tabaco y aparatos lumínicos, cuyos vendedores lograban abrirse paso a duras penas. La cantidad de personas que se reunieron en el lugar complicó de sobremanera el control de la zona por parte de las fuerzas de seguridad, que no lograron evitar las escenas de violencia y las micciones en el caño.

Una larga noche que enfilaba el adiós de una fiesta que se pretende que sea el escaparate del resto de actividades de San Fernando en verano, pues da su pistoletazo de salida. Razón por la que el Ayuntamiento ha repartido en el recinto durante estos días 10.000 revistas con la programación estival vinculada al Bicentenario.

La publicación se ha llevado a la caseta municipal y al conjunto de casetas instaladas por diferentes entidades y empresas en el recinto ferial de La Magdalena para la Feria del Carmen y de la Sal.