El alcalde anuncia su retirada política y niega que sea por casos urbanísticos

La carrera política del alcalde de Tarifa, el socialista Miguel Manella, tiene fecha de caducidad. Anunció ayer que no se presentará a la reelección en los próximos comicios municipales de 2011. Manella fue reelegido alcalde en 2007 y está al frente de un ayuntamiento formado por 8 concejales del PSOE, 7 del PP, 1 de IU y 1 del PA.

Manella adelantó anoche a este periódico que el motivo de la decisión es estrictamente personal y reconoce cierto cansancio tras dos décadas metido en tareas políticas. El alcalde asegura que su decisión es «firme e inapelable» y que en el «seno interno del Partido Socialista se conocía la noticia». Afirmó que se encuentra satisfecho con su gestión, aunque teconoce que ha habido «proyectos que han encontrado obstáculos insalvables en otras administraciones superiores».

El alcalde negó tajantemente que su decisión de abandonar la política en 2011 guarde relación alguna con el caso del Castillo de Santa Catalina. Manella y cuatro concejales de su equipo de Gobierno se encuentran imputados por un juzgado de Algeciras por un presunto delito urbanístico. La denuncia la interpuso en 2006 el PP. El portavoz popular en el municipio, Juan Andrés Gil, destacó ayer que las diligencias abiertas obedecen a un presunto delito de prevaricación, falsificación documental y actuación contra la ordenación del territorio y contra los recursos naturales en el entorno del Castillo de Santa Catalina. Según el PP, «lo que iba a ser una reforma de la Oficina de Turismo se había convertido en la concesión para una zona de ocio, comercial y de restaurantes». Gil aclaró que el juzgado paró entonces las obras a raíz de la denuncia. La oposición aguarda hora el final de la instrucción del caso y la calificación de la Fiscalía.

Manella, por su parte, dijo ayer que estaba tranquilo «porque se trata de una denuncia política y los técnicos actuaron de manera legal en este asunto».

Concesión irregular

Desde el PP se ha puesto de manifiesto que la denuncia tiene su origen en la concesión irregular de las obras a una empresa fantasma «que ha destrozado parte del patrimonio artístico de la localidad». Según Juan Andrés Gil, la obra en cuestión se adjudicó «sin memoria justificativa, estudio de viabilidad ni informe de la Intervención».

Manella negó ayer estas acusaciones e insistió en que los técnicos municipales actuaron correctamente y con el aval de varios informes. Desde la oposición, sin embargo, se pone de manifiesto que se hizo un concurso de ideas y «la adjudicación fue para una empresa que no estaba inscrita en el Registro Mercantil, además se incluía la concesión por 30 años». Mas tarde se hizo una nueva adjudicación a otra empresa con más socios, entre los que se encontraba el propietario de Montenmedio, Antonio Blázquez.

Manella es profesor de Educación Primaria y se estrenó como concejal del PSOE en 1987. Ha sido también presidente de la Mancomunidad del Campo de Gibraltar entre 1999 y 2003 y accedió a la Alcaldía de Tarifa en 2004.

Ha querido anunciar su decisión «con tiempo para que el partido comience a formar a su futuro candidato». Su concejal y diputada provincial, Paola Moreno, se perfila como posible alcaldable en 2011. Esta incógnita se despejará en el último trimestre del año.