Los socios que han abandonado recibirán su dinero a partir de la semana que viene

El presidente de Incojesa, Antonio Sánchez Mejías, explicó a este medio que «ya ha quedado todo cerrado». Esto significa que «posiblemente la semana que viene se empezará a devolver el dinero a quienes han decidido marcharse» de la sociedad por no verle futuro al proyecto o simplemente por no poder afrontar los costes económicos del mismo.

Desde el principio, Antonio Sánchez Mejías quiso dejar claro que se reembolsaría la cantidad íntegra a los socios que optaran por no seguir adelante. Un dinero equivalente al depositado en su día, es decir, 5.000 euros en total por cada acción.

Con ese fin se llevó a cabo la modificación de los estatutos de Incojesa votada por los socios, al igual que para permitir la entrada a inversores de fuera.

El presidente de Incojesa ya recalcó que «todo el dinero inicial está garantizado en Cajasol, porque no ha habido ningún movimiento salvo el pago de impuestos correspondientes y de actividad económica... y como no ha habido». Así que «las cuentas están muy claras».

«El proyecto nació con un espíritu diferente en años comerciales muy fuertes, cuando desde luego nadie imaginaba esta crisis que se nos venía encima», han señalado tanto el presidente de Acoje como el de Incojesa para justificar esta fuga de socios.

Hay que tener en cuenta que, según sus cálculos, para instalar un negocio en aquella zona son necesarios unos 300.000 euros.

Al margen de la adversa coyuntura económica, a nadie escapa que las dificultades crediticias lo hacen todavía más difícil.

En el caso, no descartado en absoluto, de que se decidiera finalmente continuar con el proyecto comercial junto a la tienda de la multinacional sueca, habría que cerrar la parte económica con el Ayuntamiento respecto a los terrenos. El siguiente paso sería la búsqueda de financiación para llevar a cabo una iniciativa que parece condenada al fracaso.