Los hosteleros alaban la medida que «da oxígeno dentro de la crisis»

La otra cara de la moneda la mostraban ayer los empresarios de la hostelería, ésos que durante los últimos años han ido viendo cómo la gallina de los huevos de oro de la Motorada se quedaba seca por el disgusto de los visitantes ante el cierre en banda de la ciudad de Jerez. De hecho, durante la pasada edición la afluencia de moteros fue mucho menor en esta localidad, mientras que en otros municipios cercanos se vivieron verdaderas aglomeraciones de aficionados al motociclismo.

Por ese motivo, el presidente de Horeca, Antonio de María, no dudó ayer en calificar de «magnífica» la noticia de que en 2010 Jerez recibirá a los moteros con una apertura total que, además, coincidirá con el puente del Primero de Mayo y con el inicio de una fiesta con tanto tirón como la Feria del Caballo -el alumbrado es el día 2 de mayo-.

Según De María, el anuncio de la alcaldesa es una buena noticia «porque de esta forma Jerez recupera su papel como ciudad abierta y hospitalaria» después de un parón de varios años que «en su momento fue lógico, porque todo se había descontrolado, pero que a la vista de la evolución y del buen comportamiento de los visitantes ya no es necesario».

Además, el líder de Horeca hizo hincapié en que «los empresarios de la hostelería tuvimos que aceptar el cierre del centro pese a que era un momento arriesgado por la crisis», y recalcó que «ahora que se ha recuperado la libre circulación llegará más oxígeno y muchos podrán salvar la situación».

En la misma línea, y como ejemplo, De María recordó a todos lo que ocurrió el año pasado en Jerez, «cuando los moteros llegaron en menor número y muchas habitaciones se quedaron vacías».