Por la «competitividad»
La patronal bodeguera Fedejerez ha tenido mucho que ver en esta decisión de que los dos Consejos Reguladores se fusionen en uno desde el punto de vista administrativo, sobre todo porque aunque vino y brandy son dos productos distintos se producen en las mismas bodegas del Marco, y para las empresas empezaba a ser demasiado costoso y cada vez más falto de lógica -según las fuentes consultadas del sector- pagar las tasas a ambos organismos para tareas que eran casi comunes.
Actualizado: GuardarAdemás, el presupuesto de los consejos era más pequeño con el paso del tiempo, sobre todo porque la principal fuente de financiación son las tasas que se abonan por litro vendido, y por hectárea de viña en el caso de los productores, en un panorama marcado por la caída de ventas (en cinco años han bajado un 20%) y por la disminución de superficie (ahora, sin ir más lejos, se empieza a arrancar).
En esta tesitura, y desde un punto de vista empresarial, las fuentes consultadas destacan que las bodegas han apostado por dar los pasos que sean necesarios para «mantener o mejorar su competitividad», y uno de ellos es esta fusión de los órganos de administración de las denominaciones.
Una medida que tiene que ver también con la que ya ha protagonizado una bodega de referencia como Osborne, que precisamente en pos de esa competitividad ha decidido rebajar la graduación de su marca de brandy Veterano, lo que coloca a este producto fuera de la Denominación de este producto.
