Jerez sufre ocho incendios provocados en apenas tres horas

La madrugada de ayer pasará a la historia más reciente de Jerez, ya que en muy raras ocasiones una ciudad como ésta se convierte en escenario en apenas tres horas de un total de ocho incendios, todos ellos provocados presuntamente por las mismas personas. Aunque afortunadamente no ha habido que lamentar víctimas, las llamas sí provocaron importantes daños materiales en diversos puntos más o menos cercanos entre sí, especialmente en lo referente a vehículos y mobiliario urbano, además de los graves perjuicios causados en un bloque de viviendas.

El rosario de incidentes comenzó alrededor de las 03.00 horas, cuando alguien prendió fuego a un Wolsvaguen Polo en la calle Atlanta, por la zona de Chapín. Los bomberos acudieron de inmediato al lugar de los hechos y utilizaron en la extinción del incendio 1.000 litros de agua, dos equipos de respiración autónoma y dos vehículos, hasta sofocarlo unos 30 minutos más tarde.

A las 04.25 horas, poco tiempo después, se requirió la presencia de los funcionarios en la avenida Sudamérica de San Joaquín, donde tuvieron que intervenir en un incendio que partió del toldo de un establecimiento hostelero y se propagó rápidamente por el mobiliario exterior, afectando a sillas, fachada y ventanas, además de parte del interior del local. Esta actuación fue muy similar a la anterior en dotación y minutos invertidos, pero apenas habían terminado su tarea los profesionales cuando se recibió otro aviso, en esta ocasión procedente de la calle Del Bajete, en la barriada Las Torres.

Este suceso afectó a un turismo que resultó quemado y cuyas llamas por cercanía acabaron prendiendo en varios contenedores y parte del cableado eléctrico. Cuando este incendio aún no había sido completamente extinguido, otros efectivos de bomberos se afanaron en acabar con el fuego que alguien había originado en un vehículo y una papelera de la calle José María Espronceda, a la altura del polideportivo Ruiz-Mateos.

Pocos minutos después, se produjo en la barriada Eduardo Delage el incendio más grave de los ocurridos durante esa noche. A las 05.24 horas diez bomberos con cuatro vehículos se apresuraron a intervenir en un edificio de la calle Duelas que ardía en llamas. Una vez más, el fuego se originó en una motocicleta, que al quemarse afectó a un turismo próximo y la explosión que produjo éste al arder afectó a su vez al bajo del bloque. Una vez que las llamas penetraron en el inmueble se propagaron rápidamente hacia arriba, por lo que los bomberos tuvieron que proceder al desalojo inmediato de las 30 familias que residen en el mismo.

Los vecinos permanecieron aproximadamente tres horas en la calle, hasta que pudieron penetrar nuevamente en sus domicilios sin correr riesgo alguno. Tres ancianos del edificio tuvieron que ser atendidos por inhalación de humo por sanitarios del 061, y mientras que uno de ellos, residente en el bajo afectado, no fue trasladado al hospital, el otro matrimonio sí tuvo que ser ingresado en urgencias. A primera hora de la mañana, no obstante, la pareja fue dada de alta y finalmente realojada en casa de un familiar, debido al mal estado en el que había quedado su vivienda.

Respecto a los daños materiales, algunas de las casas, especialmente el bajo, han quedado completamente calcinadas, por lo que sus inquilinos no podrán habitar en ellas hasta que no se subsanen los desperfectos. Este incendio fue sofocado en aproximadamente una hora, tras lo que los vecinos se dedicaron a limpiar y recuperar las pertenencias que no sucumbieron a las llamas. Los efectivos que participaron utilizaron cuatro extintores de dióxido de carbono y otros dos de polvo, y finalizaron a alrededor de las 06.15 horas.

Justo una hora antes, otro incendio acabó con dos turismos y tres motocicletas, causando graves daños a un árbol cercano, en la plaza Alborán. El Parque de Bomberos destinó a la zona un vehículo con cinco funcionarios, que utilizaron 1.500 litros de agua para acabar con el fuego. El último de los sucesos tuvo lugar en Princi Jerez, a alrededor de las 05.30 horas, cuando una motocicleta también acabó ardiendo. La Policía Local, por su parte, participó en las labores de control y extinción del fuego en la mayoría de los incendios, incluida una octava deflagración que se produjo en la calle Jardinillo, donde otro vehículo también salió ardiendo.

Así, la madrugada del jueves se saldó con la friolera de siete turismos, cinco motocicletas y un edificio de cinco plantas afectados por el fuego, además de diverso mobiliario urbano compuesto por papeleras, bidones de basura, sillas, toldos y parte de un local de hostelería. Todo un récord de daños que los afectados confían en que se subsanen lo antes posible y, sobre todo, en que las autoridades y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado depuren las responsabilidades que correspondan, para que algo parecido no vuelva a ocurrir nunca.

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