La escisión de IU divide al cuatripartito y allana el camino a una moción de censura

La inesperada escisión producida en el seno de Izquierda Unida después de que su Asamblea Local haya pedido a la concejal Nadine Fernández su salida del equipo de Gobierno tendrá a buen seguro reacciones a corto plazo en el seno del cuatripartito. La coalición PP, IU, PA y PSA atraviesa su mayor crisis desde el inicio de la legislatura hace algo más de un año. Mientras el alcalde, Ernesto Marín, se empeña en advertir «la solidez de este equipo», lo cierto es que los rumores y declaraciones de algunos de sus socios dejan entrever que la ruptura podría estar más cerca de lo que se pensaba hace tan sólo unos meses.

Para empezar, el portavoz del Partido Andalucista, Manuel Guerrero, insistía ayer a LA VOZ en la unidad que a su juicio existe en el seno del equipo de Gobierno municipal. «Lo que ha pasado es un problema de un partido en concreto y no va a impedir que nosotros sigamos trabajando y que sigamos todos muy unidos».

Sin embargo, la única concejal que tiene el PSA en Chiclana, Ángeles Polanco, a quien muchos apuntan como la bisagra en un hipotético cambio de alcaldía, manifestaba ayer no atreverse a predecir ni a hablar del futuro político local.

Esta disparidad de criterios continuará previsiblemente hasta el próximo lunes, fecha en la que se reincorporará tras sus vacaciones a la gestión local el alcalde, Ernesto Marín.

Antes, el sábado, está prevista la celebración del congreso provincial del PSOE, en el que la posible ruptura del pacto de Chiclana será uno de los asuntos estrella; González Cabaña ya reconoció ayer que no renunciarán a la posibilidad de recuperar la alcaldía si se les presenta la ocasión ahora que la unión del cuatripartito parece más débil que nunca.

De momento fuentes socialistas niegan que se esté negociando nada y se limitan a criticar la situación de «desgobierno, incertidumbre e inseguridad» que existe a su entender en la localidad.

A falta tan sólo de un concejal para poder realizar una moción de censura que arrebate el sillón a Marín, (el cuatripartito dispone sin contar a Nadine Fernández con 12 votos y el PSOE con 11), es más que evidente que en los próximos días se van a producir todo tipo de movimientos.

Hasta el momento desde IU su líder local, José Pedro Butrón, ha insistido una y otra vez en que no negociará con los socialistas mientras José María Román continúe al frente del PSOE, pero una posible salida consensuada del ex-alcalde podría facilitar el acercamiento.

De momento, nadie se atreve a hacer cábalas sobre las múltiples combinaciones que podrían darse en los próximos meses, que se presentan muy inciertos en la política del municipio.

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