Falacia del jugador: aunque creas que sí, no es posible controlar los juegos de azar
El psicólogo Juan José Rodrigo, del equipo de 'En equilibrio mental', explica por qué casi siempre prima en nosotros la sensación de control sobre el juego, en lugar de atender a la independencia de los sucesos aleatorios
Imagina que estás jugando a un juego de dados y haces tres tiradas en las que siempre sale el mismo número. Lo más probable es que poco antes de lanzar la cuarta tirada pienses: «Ya es hora de que salga un número diferente». Y lo mismo suele ocurrir cuando lanzamos una moneda al aire si durante varias tiradas sucesivas sale cara: lo más probable es que esperemos que en la siguiente salga cruz «porque ya toca». Sin embargo, es evidente que, tanto en los dados como con la moneda, cada nuevo lanzamiento es independiente de los anteriores. De hecho, en cada lanzamiento las probabilidades de sacar un número determinado en los dados, o cara o cruz en la moneda, es siempre la misma.
Por tanto, si por una cuestión de probabilidad sabemos cómo funcionan los juegos de azar , ¿por qué razón aparecen esas creencias o pensamientos cuando jugamos? Los juegos de azar generan un elevado nivel de incertidumbre y como consecuencia de esta incertidumbre aparecen estos pensamientos, cuya intención es intenar infravalorar la influencia del azar y aumentar nuestra sensación de control en el juego .
Esta forma de pensar ante este tipo de situaciones se denomina Falacia del Jugador , se trata de un sesgo cognitivo que nos hace creer que el azar es un proceso auto-correctivo en el cual una desviación en cierta dirección induce a una desviación en la dirección opuesta para restaurar el equilibrio . Es decir, la probabilidad de un suceso futuro aumenta cuanto mayor es la racha anterior del suceso contrario. En el ejemplo de la moneda, esta falacia nos haría pensar que cuantas más veces salga cara de forma consecutiva más probabilidades hay de que salga cruz.
«La falacia del jugador confía en que la probabilidad de un suceso futuro aumenta cuanto mayor es la racha anterior del suceso contrario»
Juan José Rodrigo
Psicólogo
Podemos encontrar ejemplos de la Falacia del Jugador en la ruleta, cuando pensamos que cierto número está por salir porque lleva mucho tiempo sin aparecer, o en las máquinas recreativas, cuando se utiliza la expresión 'está caliente' porque lleva muchas jugadas sin dar premios. En estas situaciones tendríamos la creencia de que el azar debe 'corregirse' y que tienen que empezar a producirse los sucesos que hasta el momento no han tenido lugar.
En cuanto a la investigación científica respecto a este fenómeno, destaca la revisión de varios estudios que llevaron a cabo Goodie y Fortune en el año 2013. Estos autores identificaron la Falacia del Jugador como el sesgo que más influye en el desarrollo de patologías relacionadas con el juego . También Labrador en el año 2010 identificó la Falacia del Jugador como uno de los sesgos cognitivos que más aparecen en el uso de máquinas recreativas, tanto en personas que no suelen jugar como en personas con problemas con el juego.
¿Qué podemos hacer para no dejarnos llevar por este sesgo cognitivo? La próxima vez que estés jugando a un juego de azar intenta parar unos segundos para reflexionar sobre tu propio pensamiento y enfatizar en la independencia de los sucesos aleatorios ante los que te encuentras. Recuerda que no tenemos capacidad para controlar o predecir los juegos de azar como en ocasiones creemos o nos gustaría. Como suele decirse, los dados y la moneda no tienen memoria.
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