Tensión política en Mijas

El inverosímil pacto que tras las pasadas elecciones municipales sellaron el PP de Mijas –11 concejales- y Ciudadanos –cinco ediles-, que llevó a la formación naranja a la Alcaldía a cambio de que facilitase a los populares la investidura de Elías Bendodo como presidente de la Diputación Provincial, está a punto de saltar por los aires. Es un secreto a voces el escaso «feeling» que hay entre los líderes locales de ambos partidos, el popular Ángel Nozal –exalcalde-, y el actual regidor, Juan Carlos Maldonado (C’s), que desde mayo ha sido objeto de sucesivas crisis de gobierno. Pero el enfrentamiento parece haber entrado en bucle interminable que amenaza con salpicar las relaciopnes de las direcciones provinciales de ambios partidos.

El último conflicto ha estado motivado por los resultados de una auditoria realizada sobre la empresa pública Mijas Comunicación que ha puesto de manifiesto que había trabajadores contratados como autónomos y que supuestamente no se siguió el procedimiento administrativo correcto para ampliar la nave donde está ubicada.

Esta circunstancia ha llevado a Maldonado a pedir el cese de Nozal y la edil Lourdes Burgos, y no ha dudado en instar a Bendodo a que torme cartas en el asunto.

No es la primera vez que el regidor acude al también presidente del PP de Málaga para que medie en las tensiones con su socio de gobierno y compañero de siglas.

«Al Partido Popular le manifesté que estoy dispuesto a dialogar, pero hay una línea roja que nunca voy a permitir que se cruce, la legalidad vigente y los procesos administrativos pertinentes», señaló Juan Carlos Maldonado en un duro comunicado, en el que señalaba que había trasladado la situación a la dirección de Ciudadanos regional y nacional.

El regidor, no obstante, no ha denunciado las presuntas irregularidades ante la justicia o las fuerzas de seguridad, por lo que desconoce el recorrido legal de las mismas. Ha sido Podemos la formación que ha puesto hechos en conocimiento de la Fiscalía y la Inspección de Trabajo.

No ocurre lo mismo con la sentencia que obliga a realizar las oposiciones para intendente de la Policía Local, un asunto ante el que el Ayuntamiento mijeño guarda silencio, a pesar de las peticiones de información de este periódico.

«Continuaremos en nuestro empeño de apartar a todas aquellas personas que la justicia determine que han tenido algo que ver o que han operado al margen de la legalidad», manifestaba ayer el regidor, quien –sin embargo– sigue manteniendo en su puesto al mando policial a pesar de la resolución que señala que hay que repetir el proceso porque se aportó «arbitrariamente» a uno de los opositores.

Esta sentencia parece no ser impedimento para que el PSOE de Mijas, quien días atrás exigía responsabilidades al más alto nivel por este caso, ahora sostenga a Maldonado en la Alcaldía. «Tiene nuestra lealtad», manifestó ayer la portavoz socialista, Fuensanta Lima.

Francisco Conejo, secretario de política institucional del PSOE andaluz, se olvidó de que los dos últimos presidentes regionales de su partido –Griñán y Chaves– están siendo investigados por el macrofraude de los ERE, y de que su partido presentó a candidadtos imputados a las pasadas municipales en Málaga, a la hora de insistir en que en «la necesidad de que el PP de Andalucía y de Málaga limpien el Partido Popular de Mijas». «Aquellos que han cometido irregularidades no deberían seguir al frente de una delegación de gobierno ni un minuto más», insistió.