Desaparece en Marbella una británica de 35 años dejando a sus dos hijos solos en casa

Rebeca Muldoon despareció de su domicilio el pasado 2 de enero y no se ha vuelto a saber nada de ella. Había tenido una discusión con su pareja y, tras aquello, nada se volvió a saber. Se ha esfumado dejando a sus dos hijos solos en casa , que ahora se encuentran con su abuela materna, que se hizo cargo de ellos el pasado 5 de enero tras activarse el protocolo establecido para estos casos. Lo hechos ocurrieron el 1 de enero. Rebeca Muldoon, británica de 35 años, asentada en una de las urbanizaciones de San Pedro de Alcántara en Marbella, discutió con su pareja. La fuerte bronca se escuchó en el vecindario. «Llamaron diciendo que había un posible caso de malos tratos . Fue una llamada externa al domicilio», explican fuentes de la investigación, que aseguran que el alertante «debió ser alguien que escuchó la pelea desde la calle y se puso en contacto con la Policía».

Los agentes llegaron a la casa de la familia y arrestaron al marido. Eran las 21.40 horas de la noche, según el atestado. Rebeca no quiso denunciar ni declarar ante la Policía Nacional. «Se le detuvo porque ella debía presentar algún tipo de lesiones . Había evidencias de que había habido malos tratos», explican las mismas fuentes. Al día siguiente, Rebeca recibió la notificación del Juzgado de Violencia de Género. Es la última vez que hay constancia de su paradero. Según la citación, tenía que presentarse el día 3 de enero a ratificar los hechos. Debía aportar al juez su declaración sobre lo sucedido , pero nunca apareció. «No fue, por lo que tampoco hay testimonio sobre el caso de malos tratos», remarcan las fuentes de la investigación.

La Policía fue a la casa tras la denuncia de una amiga de la joven. Decía que Rebeca estaba en paradero desconocido. Encontró a los dos hijos de la pareja solos. «Se llevaron con unos familiares», explican desde la Policía Nacional, que sigue buscando a Rebeca, en paradero desconocido oficialmente desde el 2 de enero. La desaparecida no lleva dinero, ni documentación y tiene el teléfono móvil apagado , según informa la Policía Nacional, que se ocupa de la búsqueda.

Se descarta que el marido haya tenido que ver «directamente» con la desaparición. Las fuentes consultadas indican que, tras la llamada alertando de los posibles malos tratos el día 1 de enero, el hombre pasó la noche en el calabozo y fue puesto a disposición judicial al día siguiente. El marido estaba, según las fuentes, bajo custodia policial cuando se produce la desaparición , por lo que no pudo participar «directamente» en la ausencia de la joven. En la actualidad, según fuentes judiciales, el marido está libertad, pero sigue en calidad de investigado por posible violencia de género y tiene que presentarse, por mandato judicial, en ante la Justicia en el momento en el que sea citado.