NARCOTRÁFICO
Caen los sicarios que mataron al narco en la comunión de su hijo
Han entrado siete personas en prisión de esta organización sueca a la que se le atribuye haber matado a otro traficante en la puerta de su casa en Estepona
Trabajaban por encargo y al mejor postor . Así fue como recibieron la misión de matar al «Maradona» en Marbella. Lo hicieron a la salida de la comunión de su hijo en el núcleo de San Pedro de Alcántara. Lo esperaron y acabaron con su vida de varios disparos cuando iba a coger el coche. Es como saldaron la deuda que tenía este narco. Tiempo después, hicieron otro ajuste de cuentas. Fueron los encargados de matar al «Zocato». Un ciudadano ceutí que también tenía otra deuda. Lo esperaron en medio de la noche, le dispararon en la puerta de su casa y huyeron en bici. Son los dos asesinatos esclarecidos tras la caída de una «violenta» banda de sicarios suecos.
La Policía Nacional y de la Policía de Suecia, en una operación conjunta, han desarticulado una organización internacional de sicarios de nacionalidades suecas y danesas. Se ha desarrollado simultáneamente en Malmö, donde hay asentadas 11 organizaciones de estas características, según Petra Stenkula, comisaria de la Región Sur de Suecia y en la Costa del Sol. Han sido detenidos nueve integrantes del grupo –siete hombres y dos mujeres de entre los 24 y 64 años de edad–.
El núcleo duro eran chicos de entre 21 y 27 años. Han entrado en prisión siete personas , cuatro en Suecia y tres en España. Dos han quedado en libertad. Dos miembros más de esta organización de asesinos profesionales estarían en prisión anteriormente por otras causas. Las detenciones estaban previstas para el pasado martes. Sin embargo, la situación se precipitó, como explicaron las autoridades españolas y suecas, por lo que los arrestos en Malmö arrancaron el pasado lunes, continuando con el operativo en una lujosa zona residencial de la Costa del Sol.
Vida de lujo
Las pesquisas apuntan a que los investigados, relacionados con el mundo del narcotráfico, perpetraban los asesinatos por encargo utilizando para sus fines armas de fuego. No actuaban para una única banda, sino que lo hacía «al que más le pagaba» . En los nueve registros domiciliarios –cinco en la provincia malagueña y cuatro en la localidad sueca–.
Se han intervenido un chaleco antibalas, un cinturón con funda de pistola, una pistola eléctrica, equipos informáticos, sprays de defensa personal, 11 teléfonos móviles, 4.165 euros en efectivo, prendas de vestir relacionadas con los hechos investigados. Así como tres relojes de gama alta , uno de ellos de oro y diamantes valorado en casi un cuarto de millón de euros. En la Costa del Sol vivían en lujosos residenciales, llevando una vida ostentación.
La investigación comenzó el pasado día 25 de marzo, tras el robo de un vehículo todoterreno y su posterior utilización en el incendio del gimnasio del «Maradona». Ese mismo día, presumiblemente, trataron de incendiar el chiringuito «Heaven» en Estepona, pero no lo lograron. Lo hicieron dos semanas después. El pasado 12 de mayo lo «ejecutaron» ante su familia, su siguiente acción probada fue el 20 de agosto con la muerte del «Zocato». La investigación sigue abierta , bajo secreto de sumario y no se descartan nuevos esclarecimientos de otros hechos delictivos.
Demanda de sicarios
Según la Policía Nacional, la banda se estaba asentando en la Costa del Sol. «Uno de ellos había montado un restaurante» , afirmó el comisario López Canedo, hasta este pasado jueves jefe de la Comisaría de Málaga. Los investigadores aseguraron que la banda había recalado en la zona ante la incipiente demanda de estos servicios . El delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, explicó que la presión al narcotráfico y los buenos resultados policiales hacen que haya tensiones entre las bandas y robos de droga , que se solucionan contratando los servicios de este tipo de grupos.
Según el comisario Francisco López Canedo, se trata de una organización «muy violenta», que se inspiraba en las películas de mafiosos para perpetrar sus crímenes. «Es fácil aprender a disparar y luego aprendían de las películas de mafiosos», remarcó el comisario, que dijo que «eran jóvenes que idolatraban a los grandes capos» , apuntó López Canedo.
En el relato de crímenes investigados, además de asesinar por encargo, se incluye extorsiones, habían llegado a atentar contra funcionarios en Suecia, tenían acceso a armamento, traficaban con drogas y cometían falsedad documental para tapar sus huellas. Según el comisario, cuando la Policía Nacional le leyó sus derechos y le dijo que estaba acusado de asesinato, preguntó que «¿dónde?» . «Traban a los funcionarios con chulería, sin empatía. Uno de ellos llegó a decir en el calabozo llevadme a la cárcel que me aburro », explicó López Canedo.
