Tribunales
Crimen de Rociana: el presunto autor queda en libertad un año después tras pagar 5.000 euros de fianza
El instructor acuerda libertad provisional, a la que se opone la familia de la víctima, al no advertir riesgo de fuga ni de ocultación de pruebas
Un año después de que el vídeo de una viuda desgarrada tras la muerte a tiros de su marido en una finca de Rociana del Condado estremeciera a Huelva y a media España , el presunto autor de los disparos que acabaron con la vida de Manuel Fernández García - que pensó que entraba para robar- , sale en libertad provisional .
Así lo ha acordado el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 2 de La Palma del Condado , encargado de la investigación del caso, tras la petición de la representación legal del investigado, José G. A ., en prisión desde su detención el 6 de mayo de 2020 por un presunto delito de homicidi o.
La defensa de José ha alegado que «no es una persona conflictiva, que carece de antecedentes penales y que actuó movido por el miedo y «la situación de amenaza» en la que se encontró, a lo que añade que no existe riesgo de fuga, de ocultación o destrucción de pruebas o de reiteración de delito.
En su argumentario, el abogado del presunto autor incide en que se trata de una persona de avanzada edad, que «está completamente integrado en su vida familiar, por lo que resulta «impensable que abandone todo su entorno para eludir la acción de la Justicia, ni tiene medios económicos para eludirla.
El instructor acuerda su puesta en libertad provisional, a la que no se ha opuesto la Fiscalía de Huelva , recogiendo precisamente una serie de exigencias – solicitadas por la acusación pública- después de que el investigado haya hecho frente al pago de la fianza , establecida en 5.000 euros.
En el auto, al que ha tenido acceso ABC , concreta que José G.A., tiene que comparecer en el juzgado – o Tribunal en el que en su recaiga la causa- cuantas veces fuere llamado y notificar cualquier cambio de domicilio que verifique, se le prohíbe salir del territorio nacional y se le retira el pasaporte , con la prohibición de obtener uno nuevo.
El instructor le prohíbe igualmente salir del término municipal de Rociana del Condado , salvo autorización expresa de la autoridad judicial para cada caso concreto o en situación de urgencia, caso en el que deberá dar cuenta de forma inmediata.
El presunto autor del crimen tiene además que presentarse a diario en el cuartel de la Guardia Civil de Rociana del Condado antes de las 15,00 horas o, en caso de que el mismo permanezca cerrado, en el más próximo a dicha localidad, con retorno inmediato a Rociana del Condado, y no podrá acercarse a menos de 200 metros de distancia de la viuda y los hijos de la víctima, ni a su domicilio y lugar de trabajo o estudio habituales, así como de comunicarse con ellos por cualquier medio o procedimiento. Por último, el juez suspende el derecho a la tenencia y porte de armas.
«Tenía un plan para asesinarlo»
La medida se ha señalado en contra de la petición de la familia de Manuel Fernández García, cuyos argumentos en contra de la puesta en libertad no han sido tenidos en cuenta por el juzgado.
En su escrito, la representación legal de la familia de la víctima mantiene que el presunto autor «había tomado una determinación y era asesinar a Manuel. Tenía premeditado, estudiado, reflexionado su plan para asesinar al manchego », apodo por el que se conocía a la víctima.
El abogado llega a decir que tenía vigilado Fernández, «tanto que para que la víctima se confiara – sostiene- el acusado escondió su vehículo para que no sospechara nadie que se encontraba en el huerto, con un arma de fuego, para darle caza y conseguir su propósito quitarle la vida, disparándole a quema ropa, en el rostro , sin posibilidad no sólo de darle la más mínima posibilidad de huir, ni tan siquiera de suplicar por su vida ».
«Resulta ruin y deleznable manifestar que la víctima adoptó una actitud agresiva y que portaba un cuchillo , como ha expuesto la defensa en su respectivo escrito, cuando sólo es necesario observar las fotografías del levantamiento del cadáver para comprobar que mi cliente estaba en una postura inclinada-agachada y con algo que jamás olvidaré en mi vida, un puño cerrado cogiendo un pequeño puñado de habas ».
La resolución es recurrible pero no tiene efectos suspensivos.
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