Logística delictiva
La 'ruta de los polígonos' en Córdoba | Del mayor alijo de hachís de Europa a la droga metida entre ajos
Las últimas grandes operaciones de Policía y Guardia Civil han tenido a las naves industriales como protagonistas
La ‘logística delictiva’ que busca operativa en forma de naves industriales en Córdoba , tiene un historial en la ciudad con varios hitos que hay que subrayar, pero que dejan ese denominador común, en gran medida, de almacenes bien ubicados para distribuir la mercancía.
El polígono de Amargacena-Torrecilla de la capital cordobesa saltó a los titulares en la prensa nacional a principios de mayo de 2013 . Un robo frustrado de fardos de droga que estaban almacenada en naves de este polígono puso al descubierto ante los agentes de la Policía Nacional el mayor alijo de hachís de Europa con 64.000 kilos de esta sustancia .
Fardo a fardo, la operación llevó varias semanas con la dificultad de sacar de golpe toda la droga obligó a blindar de agentes armados la nave depositaria hasta su desmantelamiento. Los agentes tiraron de un hilo hasta otro polígono industrial sevillano que se utilizaba de enlace donde se incautó parte de la droga y hubo más detenciones, seis en total. Córdoba se perfilaba ya entonces como un foco logístico para el transporte de esa droga que iba a ser distribuida por toda Europa. Traían la mercancía en camiones con melones.
El hoy comisario jefe provincial de la Policía Nacional, Carlos Serra, recuerda a ABC que esa operación de 2013 fue un «golpe de suerte» , aunque la cantidad fue importante. Pero la última operación conocida en plena Semana Santa es «histórica» porque han logrado desmantelar la organización criminal de principio a fin tras meses de investigación y seguimiento, explica Serra. Eso sí, con una importante diferencia cuantitativa de lo incautado frente a la operación de 2013: 4.500 kilos.
En este caso, junto a los funcionarios de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, han dejado al descubierto que Córdoba se convertía en el centro de distribución internacional de una organización criminal con ramificaciones en Francia y Portugal , entre otros países de destino de la droga .
No han sido las únicas operaciones en naves industriales. Desde 2020, la Policía Nacional en Córdoba capital ha desarrollado más de una veintena de operaciones contra el tráfico de drogas, algunas de ellas también en zonas industriales o inmediaciones.
También la Guardia Civil . En este período, ambos cuerpos han intervenido numerosas cantidades no sólo de hachís sino tabaco ilegal o marihuana en naves de polígonos o la perife ria (parcelaciones), con cultivos altamente tecnificados, como ocurrió en la zona de las Quemadas, que han ido aflorando a medida que la presión policial ha sido mayor en los últimos dos años.
Otro de los ejemplos más flagrante de este ‘núcleo logístico’ en el centro de Andalucía, que parece haber desplazado incluso el protagonismo de Sevilla que aún tiene, fue el de la operación «Garlicor» llevada a cabo por la Guardia Civil en pleno Estado de Alarma en mayo del pasado año.
Los agentes dieron al traste con una organización dedicada al transporte terrestre de grandes cantidades de hachís desde Córdoba hasta Holanda . La operación concluyó con el arresto de ocho personas de nacionalidad española y marroquí, y la incautación de 175 kilos de hachís y 61 de marihuana.
Naves para alquilar y guardar mercancía
El ‘modus operandi’ era el siguiente: la droga llegaba a Córdoba y desde aquí era transportada hasta Holanda camuflada en cajas de ajos . Las investigaciones se iniciaron meses antes, en junio de 2019, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de dos aprehensiones de droga por parte de las autoridades holandesas. Investigaciones posteriores permitieron averiguar que una organización delictiva que pudiera estar relacionada con estos envíos, estaba tratando de alquilar naves en polígonos industriales de Córdoba con el objetivo de utilizarlas para ocultar la mercancía hasta su distribución.
Detrás de estos envíos se encontraba esa organización delictiva perfectamente estructurada, compuesta por ocho personas con roles definidos dentro de la organización, que iba desde el alquiler de naves a la búsqueda de clientes para la venta de la droga , cuyo líder era un ciudadano magrebí con nacionalidad holandesa.
Tras ubicar las naves donde se estaba ocultando la droga, en dos polígonos industriales, encontraron 175 kilos de hachís y 61 kilos de marihuana que fueron intervenidos y los presuntos traficantes detenidos.
Otro de los golpes contra el contrabando fue la conocida como operación «Sanforo», a cargo de la Guardia Civil, que permitió localizar en el interior de una nave industrial de la capital 33 pallets que contenían un total de 494.500 de cajetillas de tabaco . Negocio éste con claros asientos en alguna zona concreta de la provincia de Córdoba que ha derivado su trama en ocasiones hasta la capital.
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