MEDIO AMBIENTE

La CHG reclama a los municipios planes de emergencia frente a la sequía en Córdoba

Los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes no prevén problemas en el abastecimiento por ahora

Cola del pantano de Iznájar, en una imagen del pasado 20 de noviembre JOPRGE GUERRERO/ AFP

R. VERDÚ

La sequía es una realidad desde hace meses, aunque hasta ahora las administraciones no habían empezado a implantar medidas para paliar sus efectos en la población. Y no va a ser una tarea fácil, porque en la gestión del agua en España intervienen centenares de entidades. No obstante, el principal organismo encargado de velar por el uso de los recursos hídricos en Andalucía es la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir , que ha empezado a tomar cartas en el asunto.

Una de las primeras medidas adoptadas por la CHG ha sido reunir a los alcaldes de municipios de más de 20.000 habitantes , esta misma semana, para informarles sobre el nuevo Plan Especial de Sequía del Guadalquivir. El documento está a punto de pasar al trámite de información pública, lo que permitirá a los ayuntamientos y entidades afectadas presentar sugerencias y propuestas. En Córdoba son siete municipios los interesados: además de la capital, las localidades de más de 20.000 habitantes en la provincia son Lucena, Puente Genil, Montilla, Palma del Río, Cabra y Priego . Baena es un caso aparte porque fluctúa en la barrera de los 20.000 habitantes (ahora mismo está ligeramente por debajo, según los datos oficiales del censo).

Pero sobre todo, el encuentro con los alcaldes le sirvió a la CHG para recordarles la obligación de elaborar, o revisar si ya están vigentes, los planes de emergencia locales ante la sequía . Todos los municipios de más de 20.000 habitantes deben contar con este documento, tal como establece la Ley del Plan Hidrológico Nacional. La CHG considera, según un comunicado, que tales planes son «especialmente imprescindibles en circunstancias como las actuales».

Cada ayuntamiento hace frente a la escasez de agua de manera diferente. Es el caso de Palma del Río , cuyo alcalde, José Antonio Ruiz Almenara (PSOE) , reconoce que en su localidad no existe tal plan de emergencia, ni lo ve necesario al menos por el momento, pero «aplicaremos todo lo que se nos diga». Así, en la localidad ribereña la única medida que se plantea por ahora es «una campaña de consumo responsable , porque nosotros podemos atender el consumo de agua urbano, pero el agrícola no depende de los ayuntamientos».

En Montilla el alcalde, Rafael Llamas (PSOE) , asegura desconocer si la localidad dispone de un plan de emergencia para la sequía, puesto que la gestión del agua está externalizada a través de la sociedad mixta Aguas de Montilla. Tampoco sabía de la reunión con los alcaldes publicitada por la CHG. Sea como sea, la ciudad no vislumbra problemas de abastecimiento a corto plazo, por lo que no hay medidas previstas de ningún tipo. « Nadie nos ha dado ningún aviso ni hemos lanzado ninguna actuación porque no tenemos ninguna indicación», manifiesta el regidor.

En Baena tampoco existe el obligatorio plan de emergencia, tal como ha confirmado su alcalde, Jesús Rojano (PSOE). Además de las medidas excepcionales que se toman en los meses estivales para reducir el consumo de agua, como el llenado de la piscinas municipales con cubas de riego o cortes nocturnos de agua , desde el Ayuntamiento de Baena se están están «contratando las obras» para un mayor y eficiente aprovechamiento del agua. Rojano apuntó que el Consistorio «va a instalar dos estaciones de bombeo, una en la Sierra y otra en el Marbella , para aumentar el caudal de agua que va a Albendín y la captación de agua así como la adquisición del material para reducir la cal en Albendín».

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