El recargo del IBI de viviendas vacías no se aplicará en 2017

La jornada política de ayer se convirtió en un partido de tenis de mesa entre las acusaciones lanzadas por el portavoz del PP en el Ayuntamiento, José María Bellido, y la respuesta de los portavoces de IU y PSOE, Alba Doblas y Emilio Aumente, respectivamente, a tenor de los impuestos municipales y el aumento de los valores catastrales.

Pero en medio de ese tira y afloja, al menos la responsable de Hacienda pudo despejar -a medias- una de las dudas que hay en materia de ordenanzas fiscales centrada en si IU aplicará o no este año su idea de cobrar un recargo del 50% en el IBI de viviendas vacías que tenía como gran objetivo a las entidades financieras, fondos de inversión o promotores.

En este sentido, la concejal aclaró que «ese recargo está incluido en las ordenanzas fiscales desde el año 2010 y nosotros no lo hemos modificado, lo que ocurre es que tiene sus dificultades a la hora de aplicarlo».

Y es que, en efecto, antes de aplicar el recargo es necesario saber la cantidad de viviendas vacías que hay en la capital cordobesa y a día de hoy todavía se está elaborando un censo, que no va todo lo rápido que se desea, puesto que son muchos los baremos que hay que tener en cuenta a la hora de declarar vacía una vivienda.

Doblas no pudo poner una fecha para la finalización del censo de esas viviendas, si bien dio a entender que no estará para cuando se haya terminado de redactar las ordenanzas fiscales, «para lo que nos queda todavía una reunión que servirá para perfilarlas», con lo que no se pondría en vigor de cara al próximo 2017.

Otra cuestión es que la intención de IU «siga siendo aplicar ese recargo en cuanto haya ocasión», y eso bien podría ocurrir para la elaboración de las próximas ordenanzas que afectarían ya a 2018, en caso, de nuevo, de que el famoso censo de viviendas esté rematado. Hay que recordar que existen serias dudas sobre la base legal de esta aplicación y hasta la alcaldesa, Isabel Ambrosio (PSOE), se quitó de encima la cuestión en 2015, asegurando que este año se trabajaría para su aplicación, aunque, al menos, en lo que a su parte se refiere, esa labor no ha tenido eco público. Eludió así entrar al fondo de una cuestión de la que ha hecho bandera IU, aunque ahora la pliega.