Rafael Luque, el abuelo de «todos»

«Mis nietos son todos los del campo, pero para la herencia son cuatro». Conocido como el «Abuelo» en El Arcángel, Rafael Luque es uno de los rostros más conocidos en el estadio en los últimos tiempos gracias a su activismo dentro del Córdoba. De hecho, preside una de las peñas que más se mueven por toda la geografía nacional bajo la tutela de la bandera blanquiverde.

Su pasión por el Córdoba le surgió pronto. Desde niño, así que sus recuerdos le llevan al que denomina como «estadio viejo». Donde ahora se levanta el centro comercial, Rafael empezó a sentir el cordobesismo, si bien sus comienzos fueros propios de la picaresca, como otros tantos en la ciudad.

De hecho, recuerda que «era de los que saltaban para ver los partidos por la zona del fondo norte», ya que por entonces «tampoco había mucha economía».

Eso sí, le dio para empezar a padecer la «fiebre por mi Córdoba».

Años más tarde, empezó a disfrutar de la penúltima etapa del Córdoba en Primera División con pasajes como «cuando ganamos al Barcelona». Eso sí, para él hay un momento mayúsculo: la llegada de Daniel Onega. Incluso recuerda que «era veterano, algo que a lo mejor hoy se habría criticado, pero fue una revolución porque tenía un guante en el pie».

Y esa vinculación le llegó hasta ahora, cuando ha comenzado a formar una «familia» de más de 180 miembros. Concretamente, los de su peña, que recuerda que comenzó siendo «mi gente más cercana de nietos, yernos y allegados a los que luego se han sumado más». Así, por ejemplo, ha apuntado que la culminación de lo de la peña surgió en El Carpio cuando iba a ver los partidos del filial.

Hasta ese momento, es cierto que «íbamos con la pancarta, que nunca ha dejado de estar por el estadio o fuera». Ya que «procuramos hacer todas las salidas ya sea para que vaya uno o un autocar». En todo caso, su idea principal es la de «apoyar siempre al club y al equipo». Por eso, no le duele en prenda destacar que «tengo buen feeling con el presidente y el consejo con los que intento colaborar en la medida de mis posibilidades».

En cuanto a lo que respecta al equipo en la presente temporada, Rafael Luque apunta que «siempre veo el vaso lleno, pero será porque los colores me pueden». Aunque se refuerza en la idea de que «cuando va bien es todo muy fácil, pero cuando va mal y las cosas se ponen feas es cuando debemos estar». De paso, recalca que «muchos habrían firmado estar donde está ahora, incluso los que critican todo». Así, no duda en reseñar que «con lo que tenemos, hay suficiente y no creo que mejorara lo que había haber fichado más en el mercado».