El Plan Urban Sur cumple diez años a la espera de una solución final para la Normal de Magisterio

Un mes de junio pero de 2008, el Gobierno central publicó en el Boletín Oficial del Estado la concesión del llamado Urban Sur , un proyecto para reflotar la zona más meridional de la ciudad de Córdoba con acciones sociales, laborales y culturales similar al que tuvo lugar en los años 90 en la zona de la Ribera. Diez años después de aquella determinación del Ejecutivo, el proyecto que pretendía ser la cara visible del plan, la reforma de la Normal de Magisterio como factoría de empresas creativas, sigue sin ver la luz a pesar de que han pasado tantos años debido a una ejecución plagada de problemas.

El proyecto de la Normal, que tendría que haber consumido un tercio del proyecto Urban Sur con cinco millones de presupuesto , se encuentra a la espera de que la Gerencia de Urbanismo y la empresa contratista lleguen a un acuerdo. Antes de la recepción de la obra, el organismo municipal pidió un informe externo para comprobar algunas cuestiones relativas a la ejecución de la obra . La empresa contestó que había realizado todos los elementos que se le reclamaban pero Urbanismo está realizando un segundo proceso de comprobaciones. La actuación se terminó hace más de un año con tal grado de retraso, más de dos años, que el Consistorio tuvo que reprogramar las inversiones y pagar la mayor parte del presupuesto de su bolsillo, más de tres millones de euros. El Urban Sur no se podía estar prorrogando indefinidamente.

Tanto ha pasado el tiempo que los planes han cambiado . De la idea inicial de crear un polo de desarrollo de empresas culturales, el último plan del gobierno municipal pasa por llevar a este edificio del Sector Sur a una buena parte de las oficinas de las delegaciones municipales de Servicios Sociales, Gestión, Cultura o el Imdeec, entre otros. Y como el edificio es tan grande, unos 6.000 metros cuadrados, habrá un centro cívico, una biblioteca, un espacio para las nuevas tecnologías y una escuela de emprendedores. El Consistorio ha estado negociando con distintas organizaciones sociales y empresariales cómo se puede llevar el día a día de una inversión millonaria que se encuentra en el «top ten» de esas inversiones que se encallan.

La ejecución del proyecto dio problemas desde el principio . En el último mandato de IU se toma una determinación clave que es realizar una reforma del edificio en vez de lo que parecía más lógico y barato: demoler para construir de nueva planta . Entonces, se consideró que la Normal era un icono del barrio a mantener sometiéndola a una revisión en profundidad. La empresa que se hizo con el contrato reclamó más dinero y cambios en el proyecto tal y como ocurrió con el Centro de Convenciones. La diferencia es que el juzgado que llevó el caso nunca permitió que, de manera cautelar, se paralizasen las obras . Había que seguir sí o sí.

El cambio de corporación entre el mandato del Partido Popular y el de la coalición PSOE-IU se produjo con un bajo grado de ejecución. El edificio debía estar terminado en 2013 pero en 2015 apenas si estaba una cuarta parte terminada . La conclusión final se produjo dos años después pero ni aun así se ha podido proceder al uso ciudadano de una inversión tan alta. El PP tomó la decisión de cambiar las partidas para crear una bolsa de proyectos de rápida ejecución con el objetivo de no tener que devolver dinero. Fue el actual equipo de gobierno el que ejecutó ese planteamiento en el que tuvo que hacer en unos meses lo que estaba previsto para varios años.