Agricultura
Los cítricos de la provincia de Córdoba, con precios hundidos a mitad de campaña
La entrada de mucho producto de fuera de la UE golpea al sector
La huelga de los transportistas golpea las exportaciones agroalimentarias
Han pasado cinco meses desde el inicio de la campaña de los cítricos 2021-2022 en la Vega del Guadalquivir y, ni el ritmo de los trabajos de recolección en las alrededor de 12.000 hectáreas existentes en municipios de la provincia de Córdoba como Palma del Río , Hornachuelos o Posadas, ni el número de operaciones comerciales que se están cerrando, sobre todo fuera de España, están siendo las esperadas. Todo esto repercute en los precios, que están registrando unos niveles muy reducidos, incluso por debajo de los costes de producción.
La propia Administración es consciente de esta situación. En un reciente informe de coyuntura de la Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería y Pesca se apuntaba que «como resumen de la primera parte de la campaña hay que señalar que las variedades tempranas y medias se han caracterizado por la lentitud en la recolección debido la escasa demanda y por los calibres medios-cortos por la ausencia de precipitaciones», lo que origina una menor producción.
«Está siendo una campaña bastante complicada por los bajos precios que se están alcanzando en respuesta a la menor demanda existente en el mercado». Así lo aseguró a ABC el técnico de Asaja Córdoba , Eduardo Eraso, quien denunció la «excesiva» entrada de fruta a la Unión Europea (UE) desde países como Sudáfrica desde finales del pasado año, lo que ha dificultado la comercialización de la naranja cordobesa en esos ámbitos.
Las cotizaciones registran los niveles más bajo s en los últimos años. La lonja que cada semana tiene lugar en la Cámara de Comercio señala que los valores de las variedades salustiana y late de primera calidad se han reducido en el último año entre un 25 y un 84 por ciento, mientras que la naranja de industria grupo blanca se ha abaratado hasta más de un 36 por ciento.
Precios récord
El representante de la patronal agraria recordó que los cítricos alcanzaron en 2020 unos precios récord debido al fuerte crecimiento de las ventas por parte de la ciudadanía que veía en este alimento un buen refuerzo contra la Covid-19 por su alto contenido en vitamina C. A su juicio, este hecho junto con la acumulación de stock en los almacenes de las empresas por la menor demanda se encuentra detrás de la crisis de precios actuales. Asimismo, se refirió a las menores dotaciones de agua (la gran mayoría de las explotaciones son de regadío) como un aspecto más que justifica el balance negativo de la campaña.
Ante esta situación, desde Asaja se lamenta la falta de respuesta de la Administración. «La Ley de Cadena Alimentaria no está siendo efectiva porque se establece la prohibición de que se vendan los productos por debajo de los costes de producción, pero no se fijan las cantidades mínimas de esos gastos», destacó Eraso, quien demandó «reciprocidad» en cuanto a que «se exija por parte de la UE a los terceros países que venden naranjas las mismas condiciones sanitarias, medioambientales y laborales que se nos reclaman a nosotros».
Mala previsión
A principios de otoño la Consejería de Agricultura publicó su aforo para la actual campaña de cítricos que auguraba para Córdoba una cosecha cercana a las 364.000 toneladas, un 4 por ciento más que en la temporada anterior. El técnico de Asaja apuntó al respecto que «no confiamos mucho en este estudio porque nuestra campaña se desarrolla durante varios meses, algo que no ocurre con el olivar, cuyos estudios sí son más fiables». Sea como fuere, sus estimaciones son que la producción descenderá debido al menor calibre de las frutas que se ha observado.
El gerente de la cooperativa Guadex, Juan Martínez, corroboró este diagnóstico al señalar que «desde el comienzo de la campaña todas las variedades han registrado precios muy bajos, siendo el único alimento en el que ocurre esto en este momento». Desde su punto de vista, «el producto procedente de Egipto nos está haciendo mucho daño porque sus producciones coinciden en el mercado en los mismos tiempos que las que se producen en Córdoba, lo que se suma al hecho de la llegada de más fruta de Marruecos a la Unión Europeo por el conflicto armado en Ucrania».
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