¿Dónde ver las cofradías del Viernes Santo?

No habrá lluvia –los diferentes portales meteorológicos coinciden en ello- y, por tanto, las cinco hermandades del Viernes Santo podrán realizar sus estaciones de penitencia con absoluta normalidad. Esta jornada es uno de los días grandes de la Semana Santa cordobesa, con hermandades históricas, como la de los Dolores, y otras que lucen un valiosísimo patrimonio artístico, como son los casos de la propia cofradía servita o el Santo Sepulcro, con su imponente y dorado paso procesional.

Para rematar la excelencia en este día, estas cinco corporaciones volverán otro año más a hacer estación de penitencia en la Catedral. Entre las 19.00 horas, que es el momento de la llegada de la cruz de guía de los Dolores, hasta las 23.30, la hora prevista para la salida del Descendimiento del primer templo de la Diócesis, habrá hermandades en la Catedral.

Prácticamente cinco horas de procesiones en una zona Patrimonio de la Humanidad.

A este reguero de valiosos e históricos cortejos hay que sumarle el Vía Crucis que la hermandad de la Caridad celebra entre las 10.30 y las 13.00 desde la parroquia de San Francisco, sede canónica de la cofradía. Acompaña la banda del Tercio Gran Capitán de la Legión. Una manera brillante de iniciar uno de los mejores días de la Pasión cordobesa.

Soledad

Tanto la salida, a las 18.15 horas, como la recogida, a las 23.05, son dos momentos muy especiales y absolutamente recomendables para disfrutar y contemplar el sobrio y franciscano cortejo de la hermandad de la Soledad. Sin embargo, por establecer alguna diferencia entre uno y otro instante, resulta más plástico y recogido el final de la estación de penitencia. La oscuridad de la calle Agustín Moreno realza el recogimiento que marca el personalísimo estilo de esta cofradía.

En la calle Deanes, en torno a las 21.00 horas y ya con noche cerrada, sobresaldrá de manera muy notable esta procesión. La Dolorosa de Luis Álvarez Duarte se convierte en protagonista de este enclave del Casco Histórico de Córdoba. Dada la estrechez de este viario del barrio de la Catedral, conviene adelantarse a su llegada por la más que problema concurrencia masiva tanto de turistas como de fieles, conscientes de la belleza que alcanzan los cortejos en este punto.

En la Catedral, como no podía ser de otra manera, tendrá lugar otro momento muy especial de la procesión. El que más, sin duda. Tras los Dolores y el Sepulcro, es la tercera corporación en llegar al primer templo de la Diócesis. Su hora de llegada está prevista a las 21.30 horas.

Este año estrena un manto liso en terciopelo negro, rematado con encaje de bolillo en hilo de oro, un pañuelo de encaje, un tocado de aplicación de Bruselas y la restauración de una talla del paso y policromado de los ángeles que lo adornan.

Expiración

El reciente fallecimiento de su antiguo hermano mayor, Manuel Recio, marcará este año la estación de penitencia de la hermandad de San Pablo. Para el momento de la salida, la cofradía tiene previsto interpretar una marcha fúnebre en honor al difunto. La Virgen del Rosario lucirá además el pañuelo que la cofradía le regaló a Recio. Hay que recordar que él fue la persona que dirigía los designios de la hermandad cuando esta Virgen fue coronada canónicamente en 1993. Bonito gesto que marca la diferencia del inicio de la procesión.

Dejando a un lado su paso por la Catedral (22.00 horas), que es siempre recomendable tanto por su significado como por la belleza del entorno, aquellos que prefieren contemplar este cortejo con más tranquilidad deben optar por acompañarlo a su paso por la calle San Fernando, una vez que deje la calle Cardenal González. Este momento está previsto a las 23.30, una hora perfecta que conjuga la belleza de la noche –se espera estrellada y de luna llena-, un entorno armónico al momento y la cercanía de su recogida, que apenas una hora después de cruzar esta larga calle que conecta el Casco Histórico con el centro urbano, en la calle Capitulares.

Resulta destacable asimismo el acompañamiento musical del Cristo de la Expiración, que corresponde a la capilla musical Stipes. Sus notas otorgan un sentimiento todavía mayor de recogimiento, sobriedad y elegancia a esta corporación. Este año estrenan un conjunto de tres piezas musicales tituladas «Coplas al Santísimo Cristo de la Expiración».

Descendimiento

Es la última de las cofradías de la Semana Santa que parte del Campo de la Verdad, sin duda uno de los barrios con más encanto de la ciudad en Semana. En su caso, la salida resulta más esplendorosa si cabe que la recogida. A las 18.00 horas centenares de vecinos del Campo de la Verdad y otros muchos procedentes de otros puntos de la ciudad aguardarán la salida de este crucificado descendido obra de Amadeo Ruiz Olmos, otra de las joyas imagineras que hay en la Semana Santa cordobesa, figura escoltada por los santos varones, de factura más reciente a cargo de Alfonso Castellano. La luz solar engrandecerá estos instantes de la salida.

En las calles Conde y Luque y Deanes también podrán vivirse otros momentos muy especiales de esta corporación. Al primero de estos viarios del Casco Histórico llegará en torno a las 21.30 horas y suponen los instantes previos a la realización de estación de penitencia en la Catedral, que tiene un horario previsto de llegada a las 22.30 horas.

Elegida la salida como momento recomendable para ver la procesión en la plaza de Santa Teresa (antesala de la parroquia de San José y Espíritu Santo), el Puente Romano en la noche cordobesa es otro «momentazo» para ver esta procesión. El barrio recibirá a sus titulares, el Cristo del Descendimiento y Nuestra Señora del Buen Fin.

Entre sus novedades es reseñable una de las insignias más destacadas para la cofradía, el simpecado. Además, se concluyen los cuatro arcángeles que acompañan los candelabros de cola.

Dolores

Muy numerosos, y especiales, son los momentos a recomendar para detenerse a contemplar la elegancia que caracteriza a la hermandad de los Dolores, una de las cofradías más señeras de la Semana Santa cordobesa. La salida y recogida, la calle Deanes y cualquier otro punto de la Judería, la Catedral y el callejero que atraviesa una vez acabada la carrera oficial para afrontar su regreso a la iglesia hospital de San Jacinto son algunas de las principales recomendaciones de este cortejo. Imponentes las improntas tanto del Cristo de la Clemencia, obra de Amadeo Ruiz Olmos, como de la Virgen de los Dolores, de Juan Prieto, y sin palio bajo el que cobijarse, un detalle que hace que resalta aún más la belleza de la popularísima Señora de Córdoba.

Los Dolores no sólo es la hermandad que abre el Viernes Santo, sino también la primera cofradía en cruzar la Puerta del Perdón para acceder a la Catedral. Lo hará a las 19.00 horas, aún con los último rayos de luz solar. A su salida del Patio de los Naranjos, sin embargo, es probable que haya caído la noche y el cortejo ofrezca dos ópticas diferentes.

La plaza de San Miguel, la calle Conde de Torres Cabrera y el entorno del Bailío representan otro momento clave para ver la procesión, en estos casos entre las 22.00 y las 23.00 horas. Es la última oportunidad que tienen aquellos que no quieren meterse en el habitual bullicio de la plaza de Capuchinos en cualquier noche de Viernes Santo. En cualquier caso, la recogida es uno de sus momentos con más encanto. Será a las 23.15.

Sepulcro

Es la procesión del Santo Entierro de la capital, la única, por tanto, que representa este pasaje evangélico. Es un cortejo corto, probablemente uno de los más reducidos de la Semana Santa cordobesa, pero también uno de los más exquisitos no sólo por el instante al que alude sino también por la infinidad de detalles plásticos con los que cuenta esta hermandad. Al sonido de la matraca, que abre tradicionalmente este cortejo por delante de la cruz de guía, el paso de la procesión por las calles Ángel de Saavedra y Blanco Belmonte es un momento aconsejable para quienes quieren evitar la bulla de la salida y la Catedral. Buenas y bellas imágenes las de esta procesión bajando hacia el primer templo de la Diócesis.

Entre la multitud de detalles que cuida esta cofradía, habría que destacar el apartado musical. Con objetivo de otorgarle más solemnidad y sobriedad al santo funeral que celebra la corporación radicada en la parroquia del Salvador y Santo Domingo de Silos (Compañía), el Sepulcro cuenta con un acompañamiento musical compuesto por un trío de capilla tanto con el Señor como con la Virgen, Nuestra Señora del Desconsuelo, que interpretan un repertorio fúnebre de gran calidad.

La recogida en la plaza de la Compañía, a las 23.20 horas, es uno de los instantes más esperados por los cofrades cordobeses. Aunque no es la última en entrar en el templo en la noche del Viernes Noche –después lo harán la Expiración y el Descendimiento-, para muchos cofrades y fieles este instante supone el broche final a la Semana Santa cordobesa antes del cortejo del Resucitado, en la mañana del Domingo de Resurrección.