Semana Santa Cádiz 2025

Solemnidad en un Sábado Santo en Cádiz de Soledad y Santo Entierro

El Señor Yacente y la Virgen procesionan acompañados por autoridades religiosas, civiles y militares

Guía de la Semana Santa de Cádiz 2025: horarios, itinerarios, hermandades y recomendaciones

Fotos: El Santo Entierro en el Sábado Santo de Cádiz 2025

Ana Mendoza

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Encaraba Cádiz un nuevo Sábado Santo con la mirada puesta en la única hermandad que tenía que realizar su estación de penitencia, la cofradía del Santo Entierro y Nuestra Señora de la Soledad. En la Catedral Vieja por la que tantos hermanos han pasado durante esta Semana Santa se encontraban ahora los de esta corporación histórica con la ilusión y ganas de acompañar a sus Titulares.

En el recuerdo, el Sábado Santo de 2024 cuando el hermano mayor y pregonero de la Semana Santa, Fernando Díaz, arropado por todas las autoridades allí presentes tuvo que comunicar que no habría salida procesional debido a la lluvia y al fuerte viento de aquel día. Ahora soplaba el viento, de poniente, pero los pronósticos a priori no eran desfavorables.

La hermandad de la Soledad y Santo Entierro presentaba entre los estrenos todo el sistema técnico y mecánico de la estructura del paso de la Sagrada Urna de plata realizada en 1865 por Manuel Ramírez, con cristales parisinos, así como un juego de cama para el Señor Yacente en brocado negro con galones y remates plateados. La corporación además, celebraba precisamente el 400 aniversario de la realización de la imagen del Yacente y por ello también sonaría en el recorrido la marcha Santo Entierro de Cristóbal López Gándara.

Sábado Santo solemne en Cádiz

La solemnidad e importancia histórica y patrimonial de esta hermandad se ha visto reforzada en los últimos años con el hecho de presentar un cortejo con mayor representación institucional. En esa línea trabaja la junta de gobierno y en este Sábado Santo la hermandad contaba con la presencia de la corporación municipal bajo mazas, con el alcalde Bruno García con el bastón de mando, la junta permanente del Consejo Local de Hermandades de Cádiz, el subdelegado de Defensa, el comandante Naval, el comisario Francisco Javier Vidal y Delgado Roig, el jefe provincial de operaciones de la Policía Nacional en Cádiz, el intendente de la Policía Local, el presidente de la Audiencia Provincial y el del Consorcio de Bomberos, entre otros.

Pero además estaba presente la Asociación de Mujeres de Mantilla, la Institución de los Caballeros Hospitalarios, la Orden del Santo Sepulcro así como representantes de colegios profesionales de la ciudad: abogados, peritos técnicos, procuradores, administradores de fincas...

A la hora prevista se abrían las puertas de Santa Cruz. El muñidor y dos hermanas vestidas de federica con sendos faroles marcaban el comienzo de este cortejo tan ceremonioso en el que también iban representantes de otras corporaciones de penitencia de la ciudad: La Palma, Borriquita, Sentencia, Las Aguas, Columna, Archicofradía de a Merced, Nazareno, Perdón, Afligidos...

Salió el Señor Yacente en esa magnífica urna de plata, a ruedas, pero a la vez guiada por hasta nueve mujeres de la cuadrilla que posteriormente se iban relevando. Iba escoltada por miembros del Ejército de Tierra. Tras el Señor iba el director espiritual y párroco de Santa Cruz, el padre Rafael Fernández Aguilar y la corporación bajo mazas. El capataz, Juan Carlos Acosta, daba instrucciones a la cuadrilla de mujeres que guiaba esta espléndida urna. Se escuchaba entonces Procesión de Semana Santa en Sevilla a cargo de la banda de música Nuestro Padre Jesús Nazareno de San Fernando. Junto al capataz en esta salida estaba un veterano y maestro de la carga, José Luis Pájaro, a quien también la corporación había invitado para estos primeros compases de la tarde por ese 400 aniversario ya que él mismo, como su padre y abuelo habían estado unidos a la hermandad.

Posteriormente salieron las secciones de penitentes que acompañaban a la Virgen de la Soledad. La preciosa Dolorosa, obra anónima del siglo XVIII y que durante muchos años fue Patrona de la ciudad, se aproximaba a la calle escoltada por miembros del Ejército de Tierra y también de la Infantería de Marina. Se escucharon entonces las horquillas en la rampa de salida de Santa Cruz. Salía el paso y el silencio rompía en aplausos a la Virgen. Juanjo Muñoz daba las indicaciones a la cuadrilla ante el paso. Con solemnidad y con fuerza, con la Filarmónica de Conil tocaba la marcha Virgen del Valle. Avanzaba la Dolorosa también buscando el Campo de Sur para después bajar por San Juan de Dios y seguir su caminar por Cádiz en este epílogo de la Semana Santa.

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