Semana Santa 2025
Resurrección para todo un año de esperanza
La Semana Santa de Cádiz culmina con la esplendorosa y distinta procesión de Jesús Resucitado que vive su pontifical en la Catedral, para ganar el jubileo y poner fin a días de máxima devoción y pasión cofrade
Fotos: El Resucitado procesiona por las calles de Cádiz
Cádiz despide la Semana Santa entre chapuzones y paseos por la playa
Y llegó la Pascua, la de la Resurrección. Esa que nos recuerda cuál es el principio y fin de toda Semana Santa. Jesús ha resucitado y su imagen caminando desde la Plaza de San Antonio a la Catedral es el fiel reflejo de que esto no ha terminado, sino que es el principio. El inicio de todo un año, al menos para el próximo Domingo de Ramos, en el que la esperanza será el lema fundamental de todos los cristianos y cofrades. El jubileo por el año de la esperanza, encomendado por el Papa, ha sido y será la misión principal durante lo mucho que queda de este año 2025.
Precisamente con ese trasfondo, el Pontifical presidido por Monseñor Rafael Zornoza, obispo de la Diócesis de Cádiz y Ceuta, permitió ganar ese jubileo que impregnó toda la ceremonia en el primer templo dioecesano. Con la asistencia de representantes del Ayuntamiento, con el concejal de hermandades y cofradías José Manuel Verdulla a la cabeza, el presidente del Consejo de Hermandades Juan Carlos Jurado y demás autoridades, cofrades y devotos, la misa comenzaba a las 10:30 de la mañana, hora y media después de la salida desde San Antonio de Jesús Resucitado. Como siempre en el antiguo paso de plata de Jesús Atado a la Columna, pues no hay que olvidar que es la hermandad de San Antonio la encargada de la procesión, como Archicofradía de la Santísima Resurrección.
«Ha sido una Semana Santa muy bonita con un ejercicio muy cristiano que es mirar al cielo y pendientes del tiempo. Hemos ayudado mucho a la gente que creo ha quedado confortada en la fe viendo la buena disposición, la experiencia y el buen hacer de todos vuestros pasos tan bien llevados». Así finalizaba el Pontifical con las palabras del obispo que daba las gracias por una Semana Santa «brillante», a pesar de que evidentemente como él mismo recordaba estuvo influenciada por el tiempo.
Con más retraso de lo previsto, la Cruz de Guía de la procesión del Resucitado se plantaba en el dintel de San Antonio a pocos minutos de las tres de la tarde. Caminar algo lento para un recorrido hasta la céntrica plaza gaditana con las diferentes representaciones de las cofradías gaditanas. ¿Llegará el día que está procesión esté formada por hermanos de penitencia al igual que en otras ciudades? Solo falta echar un vistazo no muy lejos de Cádiz para comprobar que las cosas pueden ser mejores en ese aspecto, sin olvidar que parece que al fin está procesión que culmina la Semana Santa gaditana se ha asentado de esta manera tras muchos cambios en los últimos años.
Más allá de eso y con mucho público en las calles, la Agrupación Ecce Mater de Cádiz hizo las delicias con un repertorio musical de primer nivel y con la marcha Resucitó con la que el Señor entraba en San Antonio. Una agrupación musical que solo toca dos días en su ciudad, Sábado Santo y Domingo de Resurrección y que poco o nada tiene que envidiar a corporaciones de fuera. No está de más que las cofradías de Cádiz miren más por lo que tenemos aquí y lo mucho y bueno que tiene la ciudad.
Con Jesús Resucitado en su templo, la Semana Santa dice adiós. Sólo 343 días para un nuevo Domingo de Ramos, para jornadas de palmas, fervor y muchísima fe. Cádiz y los gaditanos han demostrado que su pasión cofrade es una realidad, que está ciudad vive más allá de febrero. Por delante la esperanza de un año jubilar especial que lo será para las hermandades con muchos actos, traslados como el del Caído, o misiones como las del Nazareno a Puerta Tierra. Menos de un año para vivir Cádiz al paso de una horquilla y un penitente, para sentir la tradición y la devoción en su más pura esencia.