Cabildo
Ignacio Robles: «Es muy doloroso tener que abandonar San Severiano, pero es lo que ha mandado el cabildo de hermanos»
El candidato a hermano mayor del Huerto afronta con esperanza el cabildo electoral con el que se pondrá fin a una profunda crisis de casi tres años
La cofradía de la Oración en el Huerto afronta el próximo viernes 15 de marzo su cabildo electoral con el objetivo de volver a la normalidad y que los hermanos retomen la gestión de la corporación. En 2021 comenzaron los problemas en el Huerto después de que el director espiritual y párroco de San Severiano, Antonio Diufain rechazara hasta en dos ocasiones la lista presentada por Ignacio Robles. De aquel cabildo resultó elegido Manuel Sánchez Casas pero distintas desavenencias precipitaron también la salida de esa junta de gobierno de forma que la hermandad fue intervenida por el Obispado. En 2023 no hubo salida procesional, al igual que tampoco la habrá para esta próxima Semana Santa de 2024. La cita del próximo 15 de marzo es muy importante para que la cofradía recupere su actividad habitual. Consciente de todo ello y como hermano y buen conocedor de esta cofradía, Ignacio Robles se presenta de nuevo para recuperar con el patrimonio humano y marcar el futuro más próximo de la hermandad.
-Después de todo lo que ha pasado la hermandad afronta un cabildo de elecciones y ¿cómo es que usted decide dar el paso y presentar su candidatura?
-Somos un grupo de hermanos que nos duele mucho la Cofradía, sabemos que la situación es extrema pero no podíamos quedarnos impasibles después de todo lo sufrido. Así, que con ilusión y con ganas, pero sobre todo con los pies en el suelo, hemos decidido dar el paso e intentar aportar nuestro granito de arena para que todo se reconduzca y la hermandad pueda volver a la normalidad.
-Cuando ve que ha sido aprobada, ¿qué siente?
La verdad es que no hubiéramos entendido lo contrario. Ahora mismo tenemos un sentimiento de responsabilidad.
-¿Cuál ha sido su preocupación principal durante todo este tiempo?
La preocupación máxima es ver como el trabajo de muchos cofrades durante décadas se venía abajo. Se ha producido una situación de parálisis de la cofradía como no se había visto en nuestra ciudad en tiempos actuales. Nuestra hermandad nos duele y todo lo que acontecido en estos casi tres años ha sido muy triste.
-¿Qué circunstancias han cambiado desde que decidiera retirar su candidatura en aquel cabildo que marcó un antes y un después para la cofradía?
La situación se ha ido agravando cada vez más y todo ha sido un sinsentido desde entonces a ahora. Volver a recordar todo esto es abrir de nuevo heridas, que en muchos casos no han cicatrizado; así que creo que es mejor centrarse en el presente, en esta oportunidad que se nos presenta ahora y soñar con un buen futuro para la Cofradía y sus hermanos.
-¿Cómo ha afectado toda esta situación a los hermanos?
Cuando los hermanos han sido convocados y se han podido manifestar se ha podido comprobar que hay dolor y rabia por la situación y por las diferentes actuaciones que ha habido. Queda por ver a nivel de nómina de hermanos las consecuencias; por eso de las primeras cosas que hay que encargarse es del patrimonio humano.
-Hemos visto pintadas en la fachada de la iglesia de San Severiano, hemos visto lazos puestos en la verja que después se retiraron... ¿qué opina de ello? ¿y por qué se ha tardado tanto en llegar a este momento de dar un primer paso hacia lo que debe ser la normalidad en una hermandad?
Durante todo este período ha habido numerosas reacciones y muestras de desencanto con la situación. Algunas fueron muestras de apoyo pero en cambio otras no han sido nada adecuadas, como el caso de las pintadas, porque lejos de ayudar lo que supuso fue dificultar y seguir embarrando todo. Sobre la tardanza en la normalización de la situación es algo que compete responder al comisariado, al que quiero reconocer en todo momento su trabajo pese a la adversa situación, y a la delegación diocesana.
-¿Cuál será su objetivo primordial si resulta elegido HM?
El primer objetivo lo ha marcado el cabildo de hermanos. El pasado 21 de diciembre por amplia mayoría se decidió que la cofradía debía marchar de San Severiano y buscar nueva sede canónica. Así que la primera acción que debe realizar quien salga elegido es buscar un nuevo templo que acoja a nuestros Titulares y desde ahí vertebrar la nueva vida de la hermandad.
-¿Cuándo y a qué sede se trasladará la hermandad?
Entiendo que debe realizarse lo antes posible para que así la cofradía pueda normalizar su vida. A dónde es la pregunta que nos hacemos todos y creo que a la mayoría lo que más nos gustaría es que fuera lo más cercano posible a su ubicación actual, pero sabemos que las opciones son escasas y hay que estar abiertos a estudiar todas las posibilidades.
-¿Y qué piensa cuando ve que la única opción para que la cofradía siga adelante es salir de la que ha sido su casa?
Es muy doloroso tener que abandonar San Severiano, pero es lo que ha mandado el cabildo de hermanos. Nuestra cofradía en su historia nos da lecciones y no debemos tener miedo, la que se encuentre será nuestra cuarta sede canónica.
-Al margen del cambio de sede y ceñirse en recuperar y cuidar el patrimonio humano, ¿qué otros objetivos se plantean a corto plazo?
La nueva sede traerá consigo buscar una nueva casa de hermandad, que entendemos debe estar lo más cercana posible a ese templo. La casa de hermandad debe ser el centro de la vida de la cofradía, donde los hermanos pulsen el día a día, por lo que consideramos básico encontrar un local adecuado para acogerlos y para el cuidado del patrimonio material que ha atesorado la cofradía durante décadas y que sabemos que está muy castigado por estos años de parálisis. Habrá que ver si en ese local podrán almacenarse los pasos o tendremos que buscar también un emplazamiento para su adecuada custodia durante el año.
Hay que restablecer también el culto a nuestros titulares, comenzando con el culto interno, recuperando cultos establecidos en Reglas como el Triduo al Señor, la Función a la Virgen, celebraciones mensuales y ceremonias de Besamanos. Y ya, como consecuencia de recuperar esa vida de hermandad y esa actividad cultual interna llegará el momento de volver a la calle el Jueves Santo.
-¿Qué le diría a esos hermanos del Huerto que están indecisos o que ni siquiera piensan en acudir a este cabildo electoral?
El gobierno de la cofradía debe volver a las manos soberanas de los hermanos, el día 15 de marzo tenemos la ocasión de poner fin a la intervención sobre la cofradía y que esta vuelva a ser lo que nunca debió dejar de ser una gran hermandad. Es importante ir a votar, nuestra candidatura ofrecemos una opción que presenta un plan de trabajo que aúna experiencia en la gestión, ilusión y compromiso. Nuestro proyecto es nuestro compromiso con los hermanos, ahí ponemos por escrito las que serían nuestras líneas de actuación basadas en la realidad actual de la cofradía y lejos de prometer acciones o proyectos que no se van poder realizar porque ahora la prioridad es reorganizar la cofradía.. Así que animo a todos a acudir a votar.
