Diez playas para veranear en septiembre

Arenales para pasear, practicar deporte y desconectar al finalizar el periodo estival

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  1. Playa de los Muertos, Almería

    Es una enorme playa de la costa almeriense situada en el municipio de Carboneras. Debe su nombre a la frecuencia con la que históricamente llegaban a sus costas los cadáveres de náufragos o de navegantes, arrastrados por las corrientes marinas que convergen en este emplazamiento

    Su agua es azul cristalina, y su arena está compuesta por piedrecillas que van haciéndose más finas a medida que nos acercamos al agua. La orilla tiene bastante desnivel, por lo que el baño en esta playa es algo peligroso con vientos de levante.

    El acceso a la playa no es fácil. Se puede acceder por dos caminitos con bastante desnivel.

    En la parte derecha de la playa hay un par de enormes rocas en medio de la arena, los 90 metros de playa que quedan entre estas rocas y la punta de los muertos se conocen como Cala del Peñón Cortado y es una playita más abrigada de los vientos que la grande.

  2. Playa la Vall de Algairens, Menorca

    Está situada en la costa norte de Menorca, cercana a Ciudatella. Se puede llegar fácilmente en coche y también en bici.

    La arena de esta playa es blanca y fina, algo poco común en las playas del norte de Menorca. Está dividida en dos zonas. Para llegar a la más alejada del parking hay que realizar una pequeña excursión a pie de 10 minutos.

    Como en muchas otras playas de Menorca, la puesta de sol en este lugar es muy bonita.

    La playa no ofrece casi servicios, por lo que suele haber poca gente, algo perfecto si lo que buscamos es tranquilidad para relajarnos.

  3. Playa del Espigón, Huelva

    Está ubicada en el Dique de Juan Carlos I, y para acceder a ella hay que cruzar el Paraje Natural Marismas del Odiel.

    Situada en la parte derecha del espigón, tiene tres kilómetros de largo y suele ser elegida por los amantes de la pesca deportiva y por los practicantes de kite surf.

    Es una playa ideal para relajarse y disfrutar del entorno. No tiene muchos servicios, lo que hace que sea una playa poco frecuentada perfecta para los que buscan tranquilidad. Se puede disfrutar de largos paseos por ella, acompañados en muchos casos sólo por gaviotas.

  4. Playa de San Pedro Pescador, Gerona

    Enclavada en una de las bahías más hermosas del mediterráneo se encuentra esta playa rodeada de espacios naturales.

    Una de sus principales atracciones turísticas son sus más de seis kilómetros de playa de dunas. Por otra parte el paso del río Fluviá por el pueblo forma un paraje natural único. Es un lugar ideal para practicar diferentes deportes náuticos, así como senderismo, equitación o largos paseos en bicicleta.

  5. Playa de Liencres, Cantabria

    A pocos kilómetros de Santander se encuentra esta playa, un paraíso de Cantabria. Es conocida internacionalmente por sus enormes dunas enmarcadas en un espectacular parque natural.

    Tiene 2800 metros de longitud y una anchura que alcanza en algunos puntos los 50 metros.

    Su arena es fina y dorada y está rodeada por impresionantes acantilados de rocas

    El «sandboard» es uno de los grandes atractivos de la playa de Liencres, donde además se cuenta con instructores y alquiler de tablas para comenzar a aprender los movimientos de este deporte extremo.

    Los atardeceres desde las dunas de arena son algo fantástico, hacia un lado se puede disfrutar del mar y hacia el otro el majestuoso Parque natural.

    Las caminatas entre las dunas y las rocas son un clásico en esta playa, donde en general culminan en la desembocadura de la ría de Mogro y el río Pas.

  6. El Palmar, en Conil de la Frontera

    La playa de El Palmar, en Conil de la Frontera, es una de las más impresionantes de toda la costa de la luz. Cuenta con más de seis kilómetros de arena blanca en un entorno virgen.

    Se encuentra en un entorno privilegiado en el que, al tratarse del sur español, gozaremos de un clima de lo más adecuado para disfrutar de un baño de sol o de un paseo por toda su extensión. Además tiene a su alrededor playas impresionantes y está rodeada de campo, casas rurales, huertos naturales, y tiene pequeños comercios locales.

    Esta playa cuenta con la «Q» de «Calidad Turística», que otorga el Instituto para la calidad Turística Española, tras un proceso de trabajo por mejorar los servicios que se ofrecen en ella, cuyo seguimiento y asistencia técnica para la implantación del sistema de gestión de calidad se realizó a lo largo del año 2008.

  7. Playa de Ses Illetes, Baleares

    La playa balear de Ses Illetes, en Formentera, ha sido premiada como la mejor de Europa, de España y séptima del mundo en los premios Travellers' Choice Playas 2016. Los internautas recomiendan visitarla en otoño y primavera para evitar la masificación. En verano, los meses menos masificados son junio y septiembre. En esta playa puedes bucear, disfrutar del paisaje, de sus aguas cristalinas y arena blanca y fina, así como de sus puestas de sol.

  8. Cala Compte, Ibiza

    Cala Compte
    Cala Compte - WNHS

    Cala Compte en Ibiza, se sitúa en el quinto puesto a nivel nacional y décimo de Europa. Los usuarios comentan que la mejor época para ir es entre mayo-junio y septiembre-octubre. Es una playa que ofrece una de las mejores puestas de sol de la isla y es ideal para hacer snorkel.

    Se puede llegar en coche, autobús o ferry durante el verano. El barco sale regularmente desde el puerto de Sant Antoni y de varios hoteles por toda la bahía. Tiene aparcamiento, aunque se llena con facilidad.

  9. Playa de Bil-Bil, Benalmádena

    Playa de Bil-Bil
    Playa de Bil-Bil - Fuente: andalucia.org-

    Junto a la playa de Arroyo de la Miel, en pleno corazón de la localidad de Benalmádena, encontramos una de las mejores playas del litoral malagueño, la playa de Bil-Bil, de carácter urbano y repleto de servicios y lugares donde comer en su paseo marítimo, tiene una longitud de 400 metros y una anchura media de 40 metros, sus arenas son oscuras y sus aguas cristalinas. Es una de las más visitadas, por lo que el nivel de ocupación es alto, y debe su nombre al Castillo de Bil-Bil, que domina el decorado de esa parte de la costa

  10. Playa Carabassí de Elche

    Playa Carabassí
    Playa Carabassí - FLICKR

    Compuesta básicamente por arena dorada. Su extensión es de 900 metros y el nivel medio de ocupación es alto, entre otras cosas por su situación, cerca de Santa Pola. La playa está protegida, aislada, sin paseo marítimo, lo que proporciona una mayor sensación de descubrimiento. Destaca por tener una zona nudista y por su entorno natural de gran valor ecológico, rodeada de dunas. Sus usarios dicen venir hasta aquí, aunque haya que coger el coche, por el agua cristalina («cuando te cubre hasta el cuello puedes verte los pies con total nitidez») y por la temperatura del agua, más fresca de lo habitual en otras zonas del Mediterráneo.

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