Andy Murray y Kim Sears se darán el «sí, quiero» esta tarde

Faltan escasas horas para que el tenista Andrew Murray y su prometida, Kim Sears, se del el «sí, quiero» en Dunblane (Escocia), su tierra natal. Una ceremonia íntima (solo acudirán amigos y familiares cercanos) en la que se mimarán todo tipo de detalles. No se esperan grandes estrellas del mundo del deporte, la pareja ha preferido reducir su boda al máximo para disfrutar de este día tan especial junto a sus seres queridos. «Es lo mejor que le ha pasado nunca», comentaba la abuela del tenista a la revista «Hello!». Y añadía: «Cuando uno les ve en su casa, juntos, parecen tan apropiados el uno para el otro...». Y no es para menos, especialmente cuando los novios se conocieron en el año 2005 y tardaron poco en estar juntos.

Todo comenzó cuando Kim acompañó a su padre, el entrenador de tenis Nigel Sears, a un viaje. Durante ese viaje se conocieron y al poco tiempo Kim y Andy se embarcaban en una relación, que diez años después, terminará en el altar de la Catedral de Dunblane. Después de darse el «sí, quiero», los recién casados acudirán con sus invitados al Hotel Cromlix House (en Murray, Dunblane), una mansión victoriana del siglo XV que el tenista convirtió hace dos años en un hotel de 5 estrellas. Un romance que han llevado con la máxima discreción, incluso cuando la relación fue conocida por los medios de comunicación. Siempre han permanecido en un segundo plano, y así será su boda.