Aspecto exterior del Madrid Arena
Aspecto exterior del Madrid Arena - ISABEL PERMUY
Cuarto aniversario

Madrid Arena: 40 eventos, 554.000 euros de inversión y sin licencia desde la fiesta mortal de Halloween

El Ayuntamiento dota al recinto con un desfibrilador, dos cámaras y «pistolas lectoras» para controlar el sobreaforo

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Cuatro años después de la tragedia del Madrid Arena, el recinto municipal sigue sin licencia urbanística y de funcionamiento. Pese a ello, el Ayuntamiento de Madrid ha permitido la celebración de 40 eventos multitudinarios desde la fatídica fiesta de Halloween en 2012. El Consistorio se escuda en que los edificios municipales no requieren de esta autorización, aunque ello no exime que tengan que cumplir los requisitos en materia de seguridad, entre ellos, tener al día los certificados de evacuación y protección contra incendios, tal y como consta en la sentencia de la Sección Séptima de la Audiencia Provincial dictaminada el pasado 28 de septiembre.

Desde entonces, el Ayuntamiento ha tenido que destinar una partida de 554.000 euros, procedente de las Inversiones Financieramente Sostenibles, para «el edificio Madridec» con el fin de solventar las «exigencias de la inspección técnica y la normativa eléctrica».

En octubre del año pasado la delegada del Área de Cultura y Deportes, Celia Mayer, anunció una batería de medidas para «lavar» la imagen del Madrid Arena, ahora rebautizado como pabellón Multiusos. Una de las primeras decisiones fue la de oficializar el nombramiento de Raúl Varela, director de Seguridad de Madrid Destino (antes Madridec). «Han tenido que pasar cuatro años para que la gente empiece a estar formada para realizar simulacros, a tener conocimiento real de un plan de autoprotección y saber cómo actuar de los diferentes riesgos que pueden dar lugar a la activación de un plan de emergencias», explica Varela a ABC.

Protocolo de evacuación

«Lo primero que se hizo hace un año fue reforzar el equipo humano específico para eventos de gran afluencia; ampliamos la propia dirección de seguridad con dos nuevos jefes, por la gran cantidad de eventos que había que supervisar y coordinar», justifica.

El pabellón Madrid Arena se construyó sobre el antiguo Rockódromo, situado en el recinto de la Casa de Campo, como parte de las instalaciones previstas para la posible candidatura olímpica Madrid 2012. Nació como espacio multifuncional, aunque un técnico municipal que testificó en el juicio llegó a asegurar que «la condición arquitectónica del Madrid Arena es de pabellón deportivo» y que, a su parecer, «no valía para todo tipo de usos».

No obstante, desde la tragedia, el recinto ha albergado rodajes (Torrente 5 del 12 al 13 de diciembre de 2013), actos religiosos (las marianas por la familia y por la vida, del 29 al 30 de marzo de 2014), partidos de baloncesto (como el de España-Macedonia, del 20 al 22 de agosto de 2015) musicales (la ópera de Aída, del 15 al 20 de diciembre de 2014; o Sama-Sama del Cirque du Soleil, del 12 de octubre de 2015 al 12 de febrero de 2016), exhibiciones (varias ediciones consecutivas del festival de Arnold Schwarzenegger), actos publicitarios, ferias y convenciones de todo tipo.

Cuando Varela llegó a su cargo, su prioridad fue mejorar y adecuar a la normativa vigente la señalización de emergencias. Decidió poner una nomenclatura a cada sala y rincón del pabellón.

«Es impresionante, pero sólo en Madrid Arena hemos tenido que instalar 518 señales fotoluminiscentes de evacuación, de emergencia, de señalización de medios de protección contra incendios, de recorrido y salidas, todo para adecuarlo a la normativa», indica. Además de reforzar estos indicadores, se ha implantado un sistema para evitar la interrupción de fluido eléctrico, necesario para que éstas señales puedan verse y servir de guía a los usuarios en una situación de evacuación.

La mayoría de estas precauciones estaban recogidas en la Comisión de Seguridad extraordinaria que se creó tras la avalancha, pero el nuevo equipo de Gobierno ha añadido otras para atajar el sobreaforo.

Afluencia de público

La principal herramienta para evitarlo es la instalación de pistolas lectoras de códigos para controlar el número de entradas en eventos con gran número de afluencia de público, una tarea que antes controlaban las promotoras privadas. En él se incluye el cómputo del personal de los eventos como parte del aforo total. Los metros cuadrados que ocupa el mobiliario utilizado en la producción de estos eventos también se resta al aforo máximo permitido en la infraestructura. Este protocolo ya se ha puesto en funcionamiento en el resto de edificios que gestiona Madrid Destino. «También se han sustituido dos cámaras que faltaban. Tres años después de la avalancha, me encontré con dos carcasas sin cámara, una de ellas en el vomitorio donde ocurrió la tragedia», subraya Varela.

Un técnico sanitario del Madrid Arena contratado por Simón Viñals, el responsable del servicio médico de la fiesta, aseguró en el juicio que «los médicos no sabían utilizar el desfibrilador» –en la tragedia hubo varias paradas cardiorrespiratorias– y que él mismo les explicó cómo aumentar la potencia del mismo. Precisamente, para evitar que se vuelvan a repetir situaciones como esta se ha instalado un desfibrilador semiautomático en el pabellón. «Aunque no consta en la normativa tener cursos para utilizarlos, hemos impartido formación a los trabajadores de las instalaciones municipales; y seguiremos haciendo más porque hay demanda por parte de los empleados», sostiene el director de Seguridad de Madrid Destino.

Mejor acceso

El difícil acceso de los vehículos de los servicios de emergencia también fue otra de los problemas que se dieron aquella noche. Sobre este extremo, en el Madrid Arena se han abierto tres vías de acceso en los que, según especifica Varela, «cabría una escala de bomberos, que incluso podría acceder a cualquier planta del evento».

Asimismo, se han realizado estudios para analizar mejoras de seguridad en el edificio en materia de incendios, control de humo y temperatura; se ha instalado de un dispositivo de refuerzo para el control del sistema de protección contra incendios supervisado siempre por un vigilante 24 horas y se redactan memorias previas en las que se obliga a que se cumpla el uso de los horarios y el aforo acorde a la legislación. Y en eventos de más de 2.000 personas habrá unidades de Samur junto al equipo médico privado.

Aunque la Justicia haya castigado el afán de lucro del promotor de la fiesta de Halloween, Miguel Ángel Flores, el complejo sigue siendo un lugar marcado por la fatalidad. Las familias de las víctimas dudan de si esta sentencia será suficiente para sentar un precedente para que las administraciones sean más rigurosas en el control de las medidas de seguridad de los locales de ocio. Sólo el tiempo lo dirá.

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