Leiceaga se presenta en sociedad: Consciente de que una de sus debilidades es una tasa de conocimiento baja, el aspirante socialista lanzó ayer su primer vídeo de precampaña a modo de presentación. Bajo el lema de «Una respuesta nueva» —con el que concurrirá el PSdeG a las urnas el 25-S—, Leiceaga justificó su paso adelante en estas autonómicas «porque creo que debemos darle un futuro a este país». De paso, apunta que está casado y es padre de dos hijos «ya mayores». Según explicó en la presentación del vídeo, la suya será una campaña «propositiva y en positivo», que buscará estar «entre la gente» y promoverá «el diálogo». «Porque en el consenso siempre hay soluciones», apostilló. Visto lo visto, la receta no debe ser de aplicación para las listas del PSdeG.
Leiceaga se presenta en sociedad: Consciente de que una de sus debilidades es una tasa de conocimiento baja, el aspirante socialista lanzó ayer su primer vídeo de precampaña a modo de presentación. Bajo el lema de «Una respuesta nueva» —con el que concurrirá el PSdeG a las urnas el 25-S—, Leiceaga justificó su paso adelante en estas autonómicas «porque creo que debemos darle un futuro a este país». De paso, apunta que está casado y es padre de dos hijos «ya mayores». Según explicó en la presentación del vídeo, la suya será una campaña «propositiva y en positivo», que buscará estar «entre la gente» y promoverá «el diálogo». «Porque en el consenso siempre hay soluciones», apostilló. Visto lo visto, la receta no debe ser de aplicación para las listas del PSdeG. - Twitter/PSdeG

Elecciones en GaliciaLa guerra de las listas del PSdeG deriva en enfrentamientos entre territorios

Las provincias más próximas a la gestora salen a reprender a Vigo por sus quejas

Caballero esgrime su músculo electoral para acallar las críticas; y el candidato calla

Santiago Actualizado: Guardar
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La rebelión planteada por las direcciones provinciales de Pontevedra y Orense contra la gestora que dirige interinamente el PSdeG y Ferraz suma nuevos contendientes, en una guerra interna que ha alcanzado una condición global dentro del socialismo gallego. Mientras el candidato Fernández Leiceaga y la presidenta de la gestora Pilar Cancela minimizan las tensiones internas o directamente evitan pronunciarse, los sectores del partido más próximos a sus posiciones sí están alzando la voz para responder a las quejas de Abel Caballero, el rostro más visible de quienes resultaron perjudicados en el «cambiazo» de las listas.

En las últimas horas han salido a dar la réplica el secretario provincial de los socialistas coruñeses, Julio Sacristán, y el senador por designación autonómica —y vocal de la gestora— Modesto Pose. Ambos han cuestionado el discurso desleal de Caballero y su entorno con el partido, dando a entender que sus críticas sólo benefician al PP y que en estos momentos lo que toca es cerrar filas con el candidato.

Han sido excepciones a la consigna del silencio marcada por la gestora y Leiceaga, conscientes de que esta polémica distorsiona todos sus mensajes electorales. Lugo, descabezada orgánicamente —lleva casi un año con otra gestora—, no se pronuncia en esta refriega más que para cerrar filas con el candidato, como han hecho cuando han tenido ocasión la alcaldesa de la capital, Lara Méndez, o el presidente de la diputación, Darío Campos.

Ayer no habló Caballero —fue preguntado pero evitó responder—, pero sí lo hizo nuevamente el secretario provincial de Pontevedra y concejal en Vigo, Santos Héctor, el que con más dureza está aplicándose contra sus propios compañeros de partido. Si el martes lamentaba que Sacristán pretendiera «que La Coruña le haga las listas a Pontevedra», ayer sus dardos eran para Pose, de quien recordó que «cuando se presentan a elecciones en sitios donde los conocen los ciudadanos les infringen una derrota estrepitosa y esos, después, se empeñan en permanecer y llamarse renovadores».

El sector crítico cree que la situación «sólo la puede reconducir Ferraz», a la que atribuye intereses orgánicos de Sánchez en el «cambiazo»

Además, Héctor reprochó a Pose que fuera elegido senador autonómico «a dedo» por Gómez Besteiro —y luego por la gestora— «contra el criterio mayoritario del grupo parlamentario», que respaldaba la opción de José Luis Méndez Romeu, el perdedor de las primarias. «El PSOE en Galicia tiene que revisar algunos de sus criterios porque no puede ser que grandes líderes como Emilio Pérez Touriño, Paco Vázquez o Xerardo Estévez, estén en su casa y de senador autonómico tengamos a alguien que siempre perdió las elecciones», añadió. La conciliación entre las partes no se atisba a corto plazo en el PSdeG, a un mes para la decisiva fecha electoral.

Aún tuvo una última pulla Santos Héctor para el sector del partido que compara a Leiceaga con el martirio de Josep Borrell tras ganar las primarias a Almunia contra todo pronóstico, y en ese escenario enmarcan las críticas de Caballero. A través de un comunicado, el dirigente provincial reconoció no encontrar semejanzas entre ambos casos, porque mientras Borrell concurría como outsider a aquel proceso, «Leiceaga tuvo todo el apoyo» orgánico «del partido en Galicia y Ferraz».

La pelota, en Ferraz

Lejos de enterrar el hacha de guerra, Pontevedra —y en menor medida Orense— aguardan por un pronunciamiento claro de Ferraz para «reconducir la situación», algo para lo que no le reconocen autoridad a la gestora. Las fuentes consultadas sitúan el «cambiazo» en las candidaturas en un intento de la dirección de Pedro Sánchez de trazar alianzas con territorios para intentar sobrevivir en el futuro congreso federal del partido. De ahí que cediera en todas las pretensiones planteadas por Leiceaga a pesar de ser conscientes de que provocaría divisiones profundas en el PSdeG. «Han primado lo orgánico», asegura una voz conocedora del proceso, «prefieren salvarse ellos que garantizar un buen resultado electoral en Galicia».

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