El secretario general Pedro Sánchez se reunió en Ferraz hace meses con el candidato Fernández Leiceaga
El secretario general Pedro Sánchez se reunió en Ferraz hace meses con el candidato Fernández Leiceaga - FLICKR-PSOE

Aprobadas las listas para las autonómicasFerraz provoca una guerra civil en el PSdeG al ningunear a Abel Caballero

La dirección federal cuela a Gonzalo Caballero, criba a Quintas y desoye a la militancia de Pontevedra y Orense

Santiago Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La dirección federal del PSOE cogió ayer el bisturí para deshacer y rehacer las listas del PSdeG. Tras las constantes presiones de Xoaquín Fernández Leiceaga y Pilar Cancela, las candidaturas de las provincias del sur de la Comunidad fueron purgadas para colocar a afines en detrimento de las propuestas apadrinadas por el alcalde Vigo, Abel Caballero y apoyadas por la gran mayoría de la militancia. Tras la intervención de Ferraz, en Pontevedra, y en el puesto número cinco entra el sobrino y enemigo político del alcalde, Gonzalo Caballero, y la portavoz parlamentaria, Patricia Vilán, que cosechó un mínimo apoyo entre sus compañeros. También se incorpora el arousano Julio Torrado y la pontevedresa María Pierres.

Los movimientos en Pontevedra se acompasaron con la renovación de la lista en Orense

. Tal y como adelantó ABC, se cae del tercer puesto la secretaria de Organización, María Quintas, y asciende la secretaria de la agrupación de la capital, Carmen Dacosta. Por el contrario, permanece en el segundo lugar el secretario provincial, Raúl Fernández, afín a «Pachi» Vázquez.

Según fuentes socialistas consultadas por ABC, los movimientos en Pontevedra son la respuesta de Pedro Sánchez al alcalde por su «relación» con Susana Díaz. El mutuo apoyó se transformó en una hostilidad visible hacia «uno de los regidores más votados de España». Los intentos del alcalde de mantener «las apariencias y trabajar por unificar el partido» no fructificaron y Sánchez decidió salir en rescate de la gestora provisional y del candidato Leiceaga.

Por su parte, en la provincia de Orense, la dirección federal prescinde de la responsable del aparato, María Quintas. Desde la sede provincial se interpreta como un intento de «descabezar al referente de la organización orensana en la capital y en la provincia».

Las provincias leales

Y si en Pontevedra y Orense se venían larvando los cambios, en La Coruña y Lugo no hubo vetos a las listas elaboradas bajo la tutela del presidente de la Diputación deLa Coruña, Valentín González y del exsecretario del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro. En este caso, todo contó con el plácet de la gestora y del candidato y la petición de Ferrol para buscar a un representante de la urbe naval cayó en saco roto. Con la aprobació federal, la lista de La Coruña estará encabezada por el presidenciable y como número dos la coruñesa María Begoña Rodríguez Rumbo. En Lugo, se sitúa a la cabeza un hombre próximo a Besteiro, Luis Álvarez, y en segundo lugar, la actual diputada Concepción Burgo.

La reacción inmediata de los afectados fue refugiarse en el silencio. Ninguno quiso realizar declaraciones, aunque ABC confirmó que la instrucción recibida por los «purgados» es que «los proyectos políticos son de largo alcance y conviene conservar la calma». Sin embargo, esta aparente tranquilidad no oculta la «lucha interna que vive el partido» y las interpretaciones que se realizan sobre la permanencia en Pontevedra de Abel Losada y en Orense de Raúl Fernández. Algunos militantes destacados manifestaron a este periódico: «Dejan a alguno de los nuestros para que trabajemos, pero la fractura y la guerra entre nosotros es inevitable».

Los críticos no barajan presentar su renuncia a pesar de encontrarse en un grupo hostil. Al margen de los movimientos concretos, algunos dirigentes lamentaron «la intervención de la presidenta de la gestora, Pilar Cancela, cuya misión no es otra que la de intentar acabar con este partido». La batalla definitiva se librará en el próximo congreso gallego. Las partes tienen intención de comparecer, pero todavía con un equipaje incierto.

Ver los comentarios