Javier Guerra, junto a un nutrido grupo de afiliados que quisieron arroparle durante el balance de la campaña
Javier Guerra, junto a un nutrido grupo de afiliados que quisieron arroparle durante el balance de la campaña - ABC
Congreso local

La batalla por la presidencia del PP en Vigo encara muy igualada la recta final

La campaña toca mañana a su fin, aunque los candidatos tienen hasta el próximo jueves para recabar avales

Santiago Actualizado: Guardar
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«Hasta el próximo día 17 no está nada decidido». Es una de las frases más escuchadas durante esta campaña interna en las filas del PP vigués. Serán los votos que ese día, en el que se celebrará el congreso local, se depositen en la urna los que decidan el nombre de quien dirigirá el partido de cara al objetivo común de arrebatar la Alcaldía al PSOE en 2019. Pero antes queda mucho camino por recorrer y los dos candidatos apuran los días para convencer a los afiliados, los 1.050 con derecho a voto, que son la mejor opción para pilotar el partido. Para ello, aunque la carrera toca su fin este domingo según el calendario oficial, Elena Muñoz y Javier Guerra tendrán hasta el próximo jueves para seguir recabando avales.

Una batalla por la presidencia local del partido que encara muy igualada su recta final.

«No sé si vamos a ganar, pero desde luego no vamos a perder», afirmaba ayer un exultante Javier Guerra, en referencia a lo logrado hasta el momento. Por este motivo, el exconselleiro se daba por vencedor: «Ya hemos ganado el congreso, porque hemos conseguido que muchos recuperasen la ilusión», un éxito que hizo extensible a todos aquellos que apoyan su candidatura y a los que quiso agradecer muy especialmente su dedicación durante la campaña.

«Queremos escuchar a la gente y acercanos a la ciudad, porque es la única forma de ofrecer una alternativa real»
Elena Muñoz Candidata a la presidencia del PP de Vigo

En una rueda de prensa en la que quiso fotografiarse con un nutrido grupo de afiliados, los que le han acompañado durante estas tres semanas, evitó hablar del número de avales que ya obran en su poder, aunque como muestra enseñó la abultada carpeta que garantiza su candidatura. «Hemos multiplicado por mucho los presentados en su día», aseguró en clara referencia a los 108 apoyos recogidos para la precandidatura, frente a los 600 que exhibió Muñoz.

Y pese a que Guerra nota «cierto nerviosismo» en la candidatura de su oponente, fuentes consultadas por ABC niegan que sea así. Aseguran estar «muy agradecidos por el apoyo y el cariño» que están notando entre la gente con su campaña «cercana a la militancia». «Queremos escuchar a la gente y acercarnos a la ciudad, porque es la única forma de ofrecer una alternativa real», apuntaba ayer Muñoz, que suma una docena de reuniones en las que han participado alrededor de 600 afiliados de parroquias y barrios de Vigo. Unos encuentros en los que la candidata, a la sazón portavoz del grupo municipal en el Ayuntamiento, ha podido escuchar a la militancia que «demanda cercanía y estar en el día a día de los problemas que tiene la ciudad».

«En positivo»

Pero la rivalidad es algo inherente a este tipo de procesos y de ahí que Guerra contrapusiera su campaña «en positivo» a la de «estar en contra» de Muñoz», con ataques que entiende van dirigidos a su persona. Como ejemplo, se refirió a la propuesta de su adversaria, en aras de la transparencia, de publicar en la página web del partido los bienes y actividades del comité ejecutivo, así como detallar la información financiera del PP vigués a la Junta Local. Según indicó Guerra, hay afiliados molestos con esta pretensión,  y él mismo dijo no entender por qué un cargo ejecutivo del partido que no ocupa cargo público alguno tenga que publicar su estado financiero. «A mí no me importa, yo lo he hecho siempre que he ocupado un cargo público, pero no entiendo que una peluquera o un parado tenga que hacerlo», argumentó.

«El enemigo político aquí es el PSOE y sin unidad en el PP no podremos vencerle»
Elena Muñoz Candidata a la presidencia del PP de Vigo

Tras apuntar que la integración de Lucía Molares en la candidatura de Muñoz es un «pacto de copresidencias no explicado» —un acuerdo que por el momento supone la salida de la ejecutiva local del concejal y senador Miguel Fidalgo de llegar a imponerse el 17—, criticó que algunos vean en este congreso la elección de un candidato a la Alcaldía, cuando «lo que nos jugamos es qué PP queremos». Una apreciación que por la otra parte consideran «innecesaria», tal y como afirman a este diario, aunque insisten en que «el enemigo político aquí es el PSOE y sin unidad no podremos vencerlo».

«Hemos hecho una campaña en positivo, de tú a tú, presentando un programa construido desde la base y defendido por la base del partido», sostuvo Guerra, convencido de que con su trabajo el PP «estará en mejor disposición para competir por la Alcaldía».

Lo cierto es que pese a que los dos candidatos saben que lo que se dirime en el cónclave del 17 es quién tomará finalmente las riendas del partido, ninguno de ellos pierde de vista la cita con las urnas del 2019 en una plaza, la de Vigo, que se le resiste especialmente al Partido Popular en Galicia.

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