Uno de cada tres pensionistas catalanes mantiene la economía familiar

Cerca de 350.000 menores de menos de 16 años sufren riesgo a vivir bajo el umbral de la pobreza, según denuncia la UGT en «Pobreza laboral y pobreza infantil, las dos caras de la misma moneda», un informe que ha presentado esta semana Enriqueta Duran, secretaria de Políticas Sociales de la organización sindical. La cifra, que supone el 29,4% de los menores de 16 años, significa un incremento de 147.000 menores más que hace 8 años.

Además, UGT indica que los años de crisis económica (de 2008 a 2016) han incidido en gran medida en la población más joven, ya que el riesgo de pobreza de la franja infantil ha superado a los mayores de 65 años, que historicamente había sido el colectivo más vulnerable.

«Actualmente la pobreza infantil ha sustituido la franja de los 65 años, y uno de cada tres pensionistas mantiene la economía familiar», apunta Duran.

La responsable de políticas sociales indica que en los años de crisis y con la precarización del mercado las personas con menos salidas en el mercado laboral son las más vulnerables a la pobreza y la exclusión social, situación que se hace extensible a quien depende económicamente de ellas. «No hay niños pobres, sino padres y madres pobres», subraya Duran. A todo esto hay que añadir que en Cataluña una de cada ocho personas que trabaja vive en situación de riesgo de pobreza y que en 2015 el 9,7% de hogares catalanes tenían a la persona principal al paro, informa el Instituto de Estadística de Cataluña (IDESCAT).

El informe critica duramente los recortes y las políticas laborales, que han sido incapaces de paliar la situación, y pone en evidencia la Reforma Laboral que ha suscitado una situación de inestabilidad laboral y de reducción de salarios. Desde UGT reclaman la retirada inmediata y medidas que incidan en los salarios y la calidad del empleo.

El otro gran culpable que señala la organización es el sistema de protección social, que tampoco ha salvaguardado los derechos básicos de la población catalana en estos años de crisis. La organización asegura que la situación podría solventarse adoptando políticas de protección y soporte a las famílias e insiste en la urgencia de adoptar estas medidas, por ahora paralizadas a la espera de la aprobación de los presupuestos.

A su parecer, para reducir el riesgo de pobreza infantil habría que crear un modelo integral de atención a la infancia e invertir más en políticas familiares y de protección al menor. Asimismo reclaman crear un calendario para desarrollar la Renta Básica Ciudadana para menores y tomar medidas en los ámbitos del habitaje como la creación de un alquiler social y medidas contra la pobreza energética.