«Fue muy sutil, muy bonito, muy educado... Parecía que estaba, no en una iglesia, pero sí en una biblioteca. Quizás yo soy un neanderthal, pero yo quería matar al otro tipo», explicó el excampeón de los pesos pesados, de 48 años, según relata el 'USA Today' en su edición de hoy.
«Son hombres de negocios»
«El boxeo ahora es diferente. Mayweather y Pacquiao son hombres de negocios y yo soy un asesino nato, y quiero ganar y hacerlo de forma dramática y hacer daño a la gente», explicó Tyson, que inmediatamente puntualizó: «No es que me guste hacer daño a la gente, es sólo que soy bueno en ello».
A Tyson no le gustó el cara a cara: «Parecía una biblioteca»
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