Fallece Julio Michel, creador y director de Titirimundi

Licenciado en Psicología y Arte Dramático, ha muerto en Barcelona a los 70 años por un cáncer de estómago contra la que llevaba luchando varios meses

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Aunque resulte algo cursi decirlo así, los títeres del mundo están hoy de luto por la muerte de un hombre que dedicó su vida a ellos: Julio Michel. Nacido en 1946 en León, se trasladó a Francia en 1963 y allí se licenció en Psicología y Arte Dramático por la Universidad de París VIII, y, lo que fue determinante en su vida, quedó eternamente subyugado por el mundo de esos muñecos animados por la magia de sus manipuladores. Cuando regresó a España en 1975, fundó su propia compañía, Libélula, con la que pudo dar alas a su imaginación y contribuir a la consolidación de esta actividad teatral en España.

En 1985 dio un paso decisivo en ese sentido: crear Titirimundi

, el Festival Internacional de Títeres de Segovia, que convirtió en cita mundial obligada de la especialidad. Su empeño en traer a los más destacados titiriteros de todo el orbe, su irreductible capacidad organizativa y el entusiasmo con que el público segoviano acogió desde el primer momento la iniciativa han sido fundamentales para explicar la longevidad y aceptación de un certamen capaz de congregar en la capital castellana a decenas de miles de espectadores cada año. 48.000 personas acudieron el pasado mayo a la trigésima primera edición de este festival, siempre con Michel como alma impulsora.

Julio Michel (d), director del festival de Titeres «Titirimundi», durante la presentación de la XVIII edición del festival en el año 2004
Julio Michel (d), director del festival de Titeres «Titirimundi», durante la presentación de la XVIII edición del festival en el año 2004 - EFE

No me resisto a citar un párrafo de una entrevista que le hizo en 2007 mi querida Rosana Torres, en la que el creador desaparecido desvelaba algunas de las claves que explican la fascinación que produce este arte inmemorial: «Los títeres tienen dos características muy significativas: su naturaleza mágica y su prodigiosa libertad de movimientos, propiciatoria de una fecunda libertad creadora. Los muñecos son de madera pero hablan, no tienen piernas y bailan, no tienen alas y vuelan. Los niños, que aún saben interpretar mágicamente su entorno, asumen con naturalidad la condición sobrenatural de los muñecos. Los adultos también aceptan la convención de esa propuesta de juego que permite el diálogo teatral. En esta capacidad de asombrar, en la naturaleza sintética y en el valor simbólico de los personajes, radican los principios básicos y la fuerza de los títeres, una forma teatral de infinitas posibilidades».

Julio Michel nunca consideró los títeres un género menor, sino una dignísima y soberana forma de teatro con reglas propias, como tuvo oportunidad de declarar este mismo año cuando concluyó la última edición de Titirimundi, cuyos detalles cuidó con el mimo que dedicó siempre a «su» festival, pese a estar recibiendo tratamiento por el cáncer de estómago que el pasado viernes cortó en Barcelona los hilos de su vida. Sus restos mortales permanecerán hoy en el Tanatorio de Segovia y mañana serán incinerados. Más adelante, por expreso deseo de viuda, se recordará su memoria con una celebración como a él le habría gustado: con vino, jamón y tortilla, y durante la que se plantará un árbol. Descanse en paz.

Julio Michel nació en León en 1946 y murió el pasado viernes en Barcelona, víctima de un cáncer de estómago. Tras zambullirse en París en el mundo de los títeres, fundó en 1975 su propia compañía, Libélula, y diez años después, Titirimundi, el Festival Internacional de Títeres de Segovia, que conviritó en referencia mundial del género.

El director leonés llevaba desde 1985 al frente de Titirimundi, un festival que celebró el pasado mes de mayo la XXXI edición y que se ha consolidado como referente a nivel nacional e internacional en el mundo de la marioneta.

Licenciado en Psicología y Arte Dramático, en 1975 fundó la compañía de títeres Libélula, y entre 1992 y 1998 fue miembro del Consejo asesor de Teatro de la Consejería de Cultura de la Junta de Castilla y León

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