Eurovisión ofrece a la cantante rusa actuar vía satélite

Eurovisión no se queda de brazos cruzados tras el veto de Ucrania a la candidatura rusa. La Unión Europea de Radiodifusión, ente organizador del certamen, ha ofrecido a la delegación de Rusia la opción de participar sin necesidad de entrar en territorio ucraniano. La solución es simple: su representante Julia Samoylova cantaría desde un plató ruso y su actuación se ofrecería vía satélite al resto de Europa.

«Con el fin de preservar el carácter no político del festival, la UER ha estado trabajando duro para encontrar una solución a esta situación y ha tomado una iniciativa sin precedentes: Channel One (la televisión rusa) podrá participar en el concurso a través de una actuación de Julia Samoylova desde su país. Si la candidatura logra el pase para la final, se aplicaría la misma solución», expone la UER a través de un comunicado. «Esto es algo que nunca se ha hecho antes en los sesenta años de historia del certamen pero, manteniendo el espíritu de inclusión que guía al concurso, se ha tomado esta decisión para garantizar que los 43 países tengan la oportunidad de participar».

Pese a las buenas intenciones de la UER, la propuesta ha sido rápidamente rechazada por ambos países. Rusia la considera "extraña" ya que contradice "la regla estricta de que la actuación en directo debe ser sobre el escenario de Eurovisión". La televisión rusa cree que la organización "no debe inventar nuevas reglas" y que debería ser capaz de "mantener su competición de acuerdo con sus propias normas".

Mientras, los anfitriones creen que esta solución vulnera también su legislación y la rechaza de pleno. "La retransmisión de la actuación de Samóylova por los canales ucranianos viola nuestras leyes en la misma medida que su entrada en el país", ha afirmado vía Twitter el viceprimer ministro de Ucrania, Viacheslav Kirilenko.

Rusia espera un cambio en la decisión de Kiev

Lo que Moscú espera es que Ucrania dé marcha atrás en su decisión de prohibir la entrada al país de su representante. «Es injusta y lamentable y esperamos que sea estudiada de nuevo», señaló el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov. También opinó que el veto impuesto por Ucrania a la cantante por haber actuado en la península de Crimea, anexionada por Rusia, «devalúa el prestigio» del certamen. «Aunque esta historia tiene un componente ético-moral y emocional, también tiene unos hechos. Y los hechos nos dicen que el prestigio del concurso está siendo devaluado», subrayó el portavoz del Kremlin.

Ucrania cumplió ayer con su amenaza y prohibió la entrada en el país a la cantante rusa, en silla de ruedas por una atrofia muscular espinal, por su participación hace dos años en un concierto en la anexionada Crimea. El Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU, antiguo KGB) argumentó su decisión con que la joven intérprete, a punto de cumplir los 28 años, cruzó ilegalmente la frontera al acceder sin autorización a la península, un territorio que Kiev perdió en 2014 y que no renuncia a recuperar.

El viceprimer ministro ucraniano, Viacheslav Kirilenko, dejó claro no obstante que su país no tiene intención de cambiar de decisión. «Será mejor que los organizadores convenzan a Rusia para que envíe a un participante que no haya violado las leyes ucranianas».