Un abrazo de Cristóbal Gabarrón para el 70 cumpleaños de la ONU

Una gran instalación del artista español celebra la efeméride en Central Park

Corresponsal en Nueva York Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La luz azul tiñó el pasado sábado cerca de 250 monumentos de todo el mundo para celebrar el 70 aniversario de Naciones Unidas. La Gran Muralla China, las pirámides de Guiza, la Ópera de Sidney o la Alhambra de Granada fueron algunos de los tesoros culturales que se vistieron del color de la ONU. También el Empire State y la sede de la organización internacional en Nueva York, aunque la luz, con otras formas y reflejos, llegó también a Central Park. Allí se reunieron las autoridades de Naciones Unidas para inaugurar una escultura conmemorativa, «Enlightened Universe», ejecutada por el artista español Cristóbal Gabarrón, que vive entre Valladolid y la Gran Manzana. Es una gran esfera de espejos abrazada por una cadena con 70 figuras humanas, una por cada año de vida de la organización internacional.

El diámetro de la esfera -6.371 milímetros- también es simbólico: un tributo a los 6.371 kilómetros que tiene la Tierra.

Las figuras, de diferentes formas y colores, están entrelazadas, cogidas de la mano y miran a la esfera, formada por 1.860 triángulos de espejos. La colocación de los espejos distorsiona el reflejo del observador; lo que ve en la esfera es una amalgama de imágenes de las esculturas que le rodean.

«Esta escultura describe la gran esperanza que todos hemos invertido en la ONU», dijo el secretario general de la organización, Ban Ki-moon, desde el lugar en el que se colocó la escultura. «Durante siete décadas, la ONU ha servido como un faro de esperanza para los pueblos de todo el mundo», dijo la más alta autoridad de Naciones Unidas, que fue acompañado de personalidades como el presidente de la Asamblea General, Mogens Lykketoft, o Helen Clark, directora del programa de Desarrollo de Naciones Unidas. En representación de España estuvo el embajador ante Naciones Unidas, Román Oyarzun, que este este mes además tiene a cargo la presidencia del Consejo de Seguridad.

Cristóbal Gabarrón explicó que su intención fue simbolizar el objetivo de «crear sociedades fuertes». El arte puede ser una herramienta para «abrir conciencias, respetar las diferentes razas y culturas y crear lazos más cercanos de entendimiento», dijo. En esa línea, Ban aseguró que la obra representa la necesidad de «crear un mundo más inclusivo». Se unió a Gabarrón y al resto de asistentes para emular la imagen de la escultura: se entrelazaron las manos alrededor de la esfera, algo que los miles de neoyorquinos que cada día encuentran paz en este parque podrán hacerlo hasta el 15 de noviembre. La instalación rotará por varias grandes ciudades del mundo. Un destino podría ser París, donde a finales de año se celebrará una esperada cumbre sobre cambio climático, uno de los grandes retos al que se enfrentará la comunidad internacional en los próximos 70 años

Ver los comentarios