Seis increíbles lagos turquesa de Las Rocosas de Canadá

Armando Hueso

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13/07/2020
Actualizado 16/07/2020 a las 00:20h.

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A todo viajero le ha pasado alguna vez eso de visitar una ciudad, parque natural, monumento o ese típico punto turístico que parece que socialmente tienes que ver sí o sí, y acabar con una sensación de decepción y cierto sabor agridulce. Ya sea por la fama del propio lugar, por las fotos que vistes en Instagram, o por las muchas veces que has oído hablar de ese destino, a veces nos generamos expectativas que luego poco o nada tienen que ver con la realidad. Sin embargo, y aunque pueda parecer difícil, también hay ocasiones en las que sucede todo lo contrario. Y eso, es mágico.

Canadá es uno de esos países que cuenta con rincones donde el viajero puede encontrarse cara a cara con esa magia. No es el único, está claro. Y aún así lo es. Puede parecer contradictorio, pero esa es la sensación con la que acabas tras ver los paisajes mastodónticos de Las Rocosas canadienses . Su naturaleza desbordante y esos bosques infinitos que se pierden en el horizonte son solo algunos de los ingredientes de ese hechizo inevitable. Pero si hay algo que destaca en toda esta escena pictórica de Las Roscosas de Canadá , son sus lagos. Y es que si bien todo es precioso en este rincón del planeta, los parques naturales de Banff, Jasper y Yoho cuentan con auténticas joyas pulidas por el paso del tiempo y la complicidad constante del viento, la lluvia y el hielo de los glaciares. Aquí, en Las Rocosas de Canadá, se encuentran algunos de los lagos más bonitos del planeta. Y sí, las fotografías se quedan cortas.

En el Parque Nacional de Banff se encuentra el lago Moraine , una de las joyas de Las Rocosas canadienses . La panorámica de este lugar es dramática. Una cadena de picos afilados y verticales que se alzan como lanzas a más de 3.000 metros hacia el cielo. Sus aguas de un color azul vivo e intenso espectacular , se deben a las pequeñas partículas de roca que hay en el lago por la erosión de los glaciares y al reflejo de la luz del sol sobre estas. La combinación de este mágico juego de la naturaleza pinta una de las postales más increíbles de Canadá . Especialmente cuando el tiempo esta despejado y sobre el agua del lago Moraine se dibuja el reflejo invertido de la cadena de montañas que lo rodean. La mejor época para visitarlo es en junio , cuando el deshielo del glaciar llega a su máximo.

Como es habitual en Canadá, en las proximidades del lago Moraine no faltan las rutas para hacer senderismo . Bien señalizadas y para todos los gustos y niveles, puedes disfrutar de diferentes perspectivas y panorámicas de este lago de Las Rocosas . Sin duda, el más sencillo y apto para todas las edades es Lakeshore Trail , una ruta por la orilla del lago con vistas increíbles de la cadena montañosa.

Muy cerca del lago Moraine (a tan solo unos diez minutos en coche aproximadamente) se encuentra otro de los lagos más espectaculares de Las Rocosas de Canadá: Lake Louise . Este lago glaciar de color turquesa se encuentra situado en pleno corazón del Parque Nacional de Banff. Ubicado en un entorno espectacular, con el glaciar Victoria de fondo y unas montañas imponentes como escolta, hay un montón de actividades con las que disfrutar de este lugar: desde pasear a la orilla del lago tranquilamente, aventurarse en sus aguas en canoas o disfrutando de rutas de senderismo durante el verano, hasta paseos en trineo tirado por perros o caballos en invierno.

Muy popular es la ruta hacia Lake Agnes Tea House , un sendero de 3,5 kilómetros en pendiente ascendente de unos 400 metros que lleva a una casita rústica con vistas espectaculares del pequeño lago Agnes . Este acogedor establecimiento abrió por primera vez en 1905 y debe su nombre a la primera primera dama canadiense, Lady Agnes MacDonald. Eso sí, aunque la aventura merece la pena, es importante tener en cuenta que la ruta hasta Lake Agnes Tea House requiere de cierta forma física y un buen calzado .

Más al norte del lago Moraine y Louise, y ya en dirección al Parque Nacional de Jasper , justo en el margen izquierdo de la autopista Icefields Parkway , se encuentra el lago Bow . Se trata de uno de los lagos más grandes del Parque Nacional de Banff . El paisaje de este lugar es, de nuevo, imponente. Sin embargo, si por algo destaca este lago es por el perfecto efecto espejo de sus aguas en días de buen tiempo. El reflejo del monte Crowfoot en el lago Bow es, quizás, una de las instantáneas más populares de este lugar.

Aunque todos estos lagos son auténticas maravillas, Peyto Lake es uno de esos lugares que tienen capacidad de quitar el hipo y dejarte sin respiración . También localizado en el Parque Nacional de Banff, la belleza de este lago de origen glaciar se palpa desde una perspectiva más elevada que la del lago Moraine o Louise. Mientras que en estos últimos desde su base la visión ya de por sí era espectacular, lo mejor de Peyto Lake se observa desde las alturas .

Las vistas desde el mirador Bow Summit Lookout , con ese increíble color turquesa pastel del agua del lago Peyto, los inmensos bosques que dominan la zona y las masivas montañas, componen una panorámica hipnótica extraordinariamente cautivadora. El lugar es tan perfecto que no hay fotografía que no quede bonita. Aquí los filtros y efectos de las fotos los pone la propia naturaleza de Canadá .

En el Parque Nacional de Yoho (en la región de Columbia Británica) , se encuentra el lago Emerald, uno de los más bonitos de Las Rocosas canadienses. La magia de este lugar descubierto en 1882 es especial. El lago, de un color turquesa profundo cautivador , rodea una pequeña península donde se encuentra una cafetería de estilo alpino y un hotel. Aunque el lago Emerald es muy popular, y la verdad, sobran unas cuantas hordas de turistas, hay un montón de zonas en los alrededores para hacer picnic a orillas del lago, con total tranquilidad, y dejarse envolver por la naturaleza de este precioso lugar.

Aquí podrás refrescarte en sus aguas glaciares, responsables de ese color turquesa esmeralda que da nombre al propio lago. De nuevo, hacer senderismo es otra de las actividades más recomendables. Otra opción es la de alquilar canoas para tener una perspectiva diferente del lago, la cadena de montañas President que lo bordean y las tremendas cicatrices que los aludes dejan en las laderas de las montañas recubiertas por espesos bosques.

Quizás el más salvaje de todos los lagos de este artículo sea Lake O'Hara . También el menos masificado por turistas. Su ubicación ayuda. Situado a en el Parque Nacional de Yoho a más de 2.000 metros de altura, solo se puede acceder a pie o en autobús . Reservar plaza en el bus no es tarea fácil, así que deberás hacerlo con tiempo si no te quieres perder uno de los lagos más bonitos de Canadá . La opción de llegar a pie tampoco es fácil. Se trata de unos 11 kilómetros aproximadamente y con un desnivel de 400 metros. ¡Y hablamos de solo ida!, luego queda la vuelta. Salvo que vayas a acampar o alojarte en las cabañas del histórico Lake O'Hara Lodge, ir hasta este espectacular lugar caminando no es una buena opción.

Eso sí, el lago O'Hara es uno de esos lugares únicos que no se olvidan. Las vistas, ya sean a pie del lago o desde la perspectiva que da la altitud de alguno de los numerosos puntos que hay en su entorno, son e-s-p-e-c-t-a-c-u-l-a-r-e-s. Su color azul y camaleónico, junto con los bosques y montañas afiladas, serán una de las instantáneas más mágicas que verás en tu ruta a través de Las Rocosas de Canadá .

Y es que aunque hay muchos lugares increíbles en el mundo, hay pocos tan mágicos como los increíbles lagos de Las Rocosas canadienses . Y no son lo único impresionante de esta región de Canadá que abarca parte de Alberta y Columbia Británica . Sus bosques infinitos, que te acompañan durante kilómetros y kilómetros sin interrupción, los glaciares de la zona que te dejarán helado, paisajes sobrecogedores allá donde mires, la belleza natural de la isla de Vancouver , los avistamientos de orcas y otro tipo de ballenas, así como la moderna ciudad de Vancouver o la coqueta y colonial Victoria , son otros de los grandes atractivos de los que podrás disfrutar en tu viaje. Y todo ello con la seguridad de que en Alberta o la Columbia Británica no hay espacio para la decepción Esa es una palabra que los paisajes de Canadá no conocen.