La tarjeta significaba la quinta para el luso, que debería cumplir castigo frente al Éibar este sábado. Lo sencillo para el Real Madrid sería no recurrir. La entidad opina, sin embargo, que se cometieron dos decisiones perjudiciales contra el jugador y el equipo y desea que lo comités de la Federación Española apliquen la justicia.
El Real Madrid espera que sea el Comité de Competición, la primera instancia, el que retire la sanción impuesta por el árbitro. Hasta los jugadores del Rayo manifestaron que era penalti . Si no fuera así, el Real Madrid acudiría al Comité de Apelación.
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