turismo

La Sierra cruza un puente de diciembre «bastante bueno»

Localidades como El Bosque, Grazalema, Setenil o Zahara vuelven a acaparar las visitas y los llenos hoteleros durante estos días de fiesta

El tiempo ha permitido incluso momentos de mangas cortas a la hora de pasear por los pueblos de la comarca. FRANCIS JIMÉNEZ

JOSE M. VILCHES

CÁDIZ

La Sierra de Cádiz siempre es uno de los destinos elegidos en este puente de diciembre para disfrutar de una escapada previa a la Navidad que sirve para relajar cuerpo y mente y cargar las pilas de cara a la recta final del año y al comienzo del año nuevo.

La mayoría de las personas que compran décimos de Lotería de Navidad se hace la típica pregunta: ¿Y si toca? Y quienes apuestan por pasar unos días en los municipios serranos de la provincia gaditana en estos fríos días de diciembre, se hacen otra pregunta que no es menos típica: ¿Y si nieva?

Si ir a la Sierra es como comerse una tarta, la nieve, cuya aparición siempre está en el aire durante estos días, es la guinda del pastel. Pero la Sierra, y eso lo sabe todo aquel que ha estado alguna vez en sus maravillosos rincones, es algo más que nieve. Y hay múltiples formas con las que disfrutar de las bajas temperaturas y de entrar en calor.

Los hoteles de las localidades serranas han vuelto a estar rozando los máximos niveles de ocupación desde que arrancara el puente de diciembre. El sector turístico adelantó que, al ser los días festivos miércoles y viernes, los turistas se dividirían entre el primer tramo de la semana y el segundo. Y el colofón llega este fin de semana con los últimos llenos en la Sierra de Cádiz.

La ocupación hotelera en la comarca viene superando los últimos años las expectativas y ya se encuentra en niveles incluso mejores de antes de la pandemia de coronavirus. Ha vuelto la vida.

Y es que cada año van en aumento las ganas de los vecinos de la provincia y de los visitantes de pasar unos días por pueblos como El Bosque, Grazalema, Setenil o Zahara de la Sierra. El lleno se esperaba en toda la comarca, pero esas son las poblaciones de la Sierra en las que más afluencia de público se suele dar.

Muchas de las personas que visitan la Sierra optan por realizar actividades al aire libre relacionadas con la naturaleza como disfrutar de los senderos de la zona o realizar la Ruta de los Pueblos Blancos.

La amenaza de lluvia, eso sí, ha dado al traste con algunas reservas. Así lo explica Rosa Salguero, del hotel de Tugasa Las Truchas, en El Bosque: «Desde un principio hemos estado hasta arriba, con todo reservado, pero es verdad que la lluvia le ha quitado las ganas de venir a alguno que otro y hemos sufrido algunas anulaciones de habitaciones. El resto de hoteles de la red han estado más o menos igual, aunque aquí en El Bosque siempre solemos tener más visitantes».

Atrás queda la pandemia de COVID-19. Y de qué manera. «Nosotros particularmente estamos en mejores niveles de ocupación que antes de que estallara el coronavirus, mucho mejor. Y para el fin de semana las reservas de las habitaciones se han llevado a cabo al completo. Se nota además que hemos hecho reformas en las instalaciones y que la gente lo está valorando, lo está teniendo en cuenta», celebra Rosa Salguero.

Antonio Galindo es el presidente de la Asociación de Turismo Rural de la Sierra de Cádiz. «Mucha gente concentrada y mucha prisa. Todo el mundo quiere comer además a las dos y media y es imposible dar de comer a todos. En lo que refiere a los alojamientos sí tenemos el control de las reservas, y podemos decir que ha estado todo casi al cien por cien, quitando alguna anulación de reserva de última hora. Pero en los restaurantes ha habido quien ha ido sin reserva, que ha optado por esperar mesa… y no podemos medir cuantos nos han visitado», adelante valorando el puente que culmina este fin de semana.

Al decir que todo el mundo quiere comer a las dos y media queda claro el perfil del visitante… «Sí, mayoritariamente español. De hecho podemos hablar de un 70% de vecinos de Sevilla, un 25% de gente de Cádiz y un 5% del resto de España y de fuera de España», desmenuza Antonio Galindo.

«Son muchos los que optan por visitar la Sierra de Cádiz en este puente del mes de diciembre y se nota que la gente ha aprendido la lección de otros años. Se hacen las reservas con mucho tiempo de antelación y por eso podemos calibrar el número de visitantes con las reservas en la mano», apunta.

«Se puede decir que el puente ha sido más que bueno, bastante bueno. El jueves, por ejemplo, día laboral, aunque enmarcado en el puente, hemos estado hasta arriba. El fin de semana es espera que sea el colofón a un gran puente de diciembre para la comarca», añade haciendo una primera valoración sobre el terreno.

«Hay localidades que podemos llamar estrellas, casos de Zahara, Grazalema, Setenil o El Bosque. Casi al cien por cien todas en lo que a alojamientos y hostelería se refiere. Y lo que viene pasando en los últimos años es que hay localidades vecinas que se aprovechan de que no hay camas en esos municipios más demandados. Prado del Rey, por ejemplo, es uno de los puntos que está teniendo mucho protagonismo últimamente», explica el presidente de la Asociación de Turismo Rural de la Sierra de Cádiz.

«Mucha gente y lo más negativo para los hosteleros es que, debido a los precios, el ticket de los consumidores se ha contenido. Son muchos los que preguntan por tapas y, para entendernos, huyen de grandes homenajes gastronómicos», concluye Antonio Galindo.

Muchos atractivos

Gran variedad de atractivos más allá de la sensación continua de estar viviendo dentro de una postal y de la gastronomía local, que no es poco. A ello hay que sumar las actividades preparadas por los distintos municipios para estas fechas prenavideñas y los famosos belenes vivientes que ya se han podido visitar. Benamahoma dio el pistoletazo de salida el pasado 2 de diciembre y este fin de semana llega el turno de Bornos y Prado del Rey. El siguiente fin de semana las recreaciones de los belenes seguirán por el resto de las localidades serranas.

La gastronomía, otras de las joyas de esa comarca, merece un punto y aparte. Y es que son muchos quienes van buscando alimentar algo más que la retina de los ojos y apuestan por añadir la palabra gastronómico a la palabra turismo. Y para eso, para el turismo gastronómico, la Sierra de Cádiz es una delicia. En la cocina tradicional de la Sierra se nota el paso de la historia en el sabor de sus platos. La influencia árabe, cristiana o judía se hacen presentes en los olores y sabores. Y ahí están las tagarninas, los espárragos, las hortalizas, las truchas.... Ricas sopas, gran variedad de carnes o estofados de infarto suelen estar en las cartas de bares y restaurantes. Cada municipio aporta su tradición y sabiduría popular. Y siempre se probarán cosas nuevas según el pueblo que se visite, algo que también llena de turistas todas estas localidades.

Imposible dejar de lado los quesos. La Sierra es el lugar ideal para degustar quesos únicos como los elaborados a partir de la leche de la oveja merina grazalemeña y de la cabra Payoya, obteniéndose un producto ecológico y tradicional.

Adiós al dispositivo de Tráfico

Tráfico espera más de 200.000 desplazamientos en la provincia durante este puente de diciembre.

El dispositivo especial comenzó el pasado martes día 5 a las tres de la tarde y finaliza este domingo 10.

La salida de los grandes núcleos urbanos ha tenido lugar en dos fases: la primera, el martes y miércoles por el inicio del marcado puente; la segunda, entre el jueves y viernes por el comienzo del día festivo y el fin de semana posterior.

El retorno se centra principalmente en este domingo día 10.

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