Conmoción en la Sierra Norte por la muerte del ciclista arrollado por un conductor ebrio en Sevilla

«Ha sido un palo tremendo. Este pueblo es muy pequeño y todos nos conocemos. Pero es que además Francisco Javier era una referencia para los amantes del ciclismo que vienen a nuestra localidad a practicar ese deporte».

El alcalde de Guadalcanal, Manuel Casaus, digiere como puede la noticia del fallecimiento de Francisco Javier Cabeza, de 37 años, quien moría este domingo tras ser arrollado por un turismo en la avenida Montesierra de la capital. El conductor dio positivo en alcohol y en consumo de drogas. Tras ser detenido, fue enviado a prisión.

Francisco Javier permaneció varias horas en muerte cerebral en el hospital Virgen del Rocío. Durante ese tiempo, el equipo médico pudo extraerle sus órganos, que han servido para una donación múltiple.

El fallecido, casado y con dos hijos pequeños, vivía con su familia en Sevilla pero mantenía vivos los lazos con su pueblo. «Venía en vacaciones, los fines de semana. Nunca se alejó de Guadalcanal», señala Casaus, quien recuerda también el año que estuvo ejerciendo como profesor de matemáticas en su localidad natal. En Guadalcanal vive una hermana de Francisco Javier, que regenta una tienda y su padre, que ha sido trabajador del Ayuntamiento, comenzaba a recibir ayer las condolencias de una localidad en estado de «shock».

El fallecido era el alma de la prueba ciclista La Capitana, que cumplió el pasado mes de abril su séptima edición. Este evento abre el circuito provincial de Sevilla XCM, siendo valedera para el ranking andaluz.

Francisco Javier, que pertenecía al equipo Fernando Torres Probike, «estaba trabajando para que la prueba fuera puntuable a nivel nacional. Eso hubiera servido para poner a Guadalcanal en escaparate nacional», se lamenta el alcalde, quien ha adelantado a ABC que van a proponer que La Capitana sea rebautizada como Memorial Francisco Javier Cabeza, en «homenaje a la persona que tanto trabajó por esa prueba».