ENTREVISTA
Fiscal de ciberdelitos en Cádiz: «Ahora te roban desde el salón de sus casas, en pijama y jugando a la Play»
El delegado de Criminalidad Informática de la Fiscalía provincial, Mario Real, alerta sobre el «brutal» incremento de causas de estafas que existen en la provincia y llama a la prudencia y el control
Además advierte del notable aumento de casos de pornografía infantil cometidos por redes y cree que sería necesario intensificar las campañas educativas públicas de prevención

Hace tiempo que el fiscal delegado de Criminalidad Informática de Cádiz, Mario Real, decidió dejar su Apple Watch en un cajón y usar mejor un Casio de toda la vida. Y no por anacronismo o por dar un toque 'vintage' a su estilo sino, simplemente, porque ya tenía suficiente con su día a día. Con estar permanentemente conectado a un mundo del que ya le viene cada hora, cada minuto, demasiada información. Y trabajo. De hecho quizá sea una de las personas de la provincia que más sabe de la tecnología y sus consecuencias. De lo que puede suponer en la vida real todo ese universo de la globalización interconectada. De como enreda, de las ventajas de esta ventana, pero también de como es capaz de ponernos en riesgo. Este fiscal junto al resto de sus compañeros de área asumen cientos de denuncias y de procedimientos sobre cibercrimen.
Lleva al frente de este grupo diez años y advierte de que cada vez son más causas las que tienen que investigar y resolver. En frente, delincuentes 4.0 sin escrúpulos, estafadores, pederastas, maltratadores que utilizan internet y las redes sociales para engañar, corromper, abusar... en definitiva, para hacer daño. «Cada vez hay más peligros y nos fiamos demasiado, hay que tener mucho cuidado, de verdad...», insiste una y otra vez como un David que lucha contra Goliat pero que tiene claro que hay que persistir hasta ganar.
- Comenzamos con la labor que hace la Fiscalía de la que es delegado. Quizá está en uno de los momentos de mayor cambio y más de unos años para acá, ¿cree que la criminalidad informática se ha convertido en una de las principales amenazas que existen en la actualidad?
- Yo llevo en la especialidad diez años, cinco como enlace y cinco como delegado provincial, y no tiene nada que ver cómo estaba esto en 2015 a cómo está ahora. Antes había estafas, había algunos casos de pornografía infantil, daños informáticos, etcétera, pero la sofisticación y el volumen de los asuntos que tenemos ahora no es comparable con lo que había hace una década. Desde entonces es brutal. Es a todas horas, todos los días, sobre todo la estafa y otros delitos también, porque nuestra especialidad es muy heterogénea.
-¿Es la estafa entonces el delito que mayor incidencia está teniendo en la provincia?
-Sí, en todas sus vertientes y con muchísima diferencia. Por desgracia después situaría a los delitos sexuales con menores cometidos a través de internet, sea el grooming, la elaboración o la distribución de pornografía infantil o incluso la posesión, pero también los daños informáticos, falsedades a través de internet, delitos de odio en colaboración con la Fiscalía de ese área, y todos los tipos de sexuales, ya le digo, exhibicionismo, grooming, pornografía, incluso agresiones sexuales ya que en un primer momento toman contacto por la Red.
- Incluso la violencia de género, ¿no?
-Claro, trabajamos también en coordinación tanto con Fiscalía de Delitos de Odio como con Fiscalía de Violencia de Género, porque donde antes, por poner un ejemplo, el maltratador amenazaba en persona, ahora lo hace por redes sociales, un mensaje de Instagram, WhatsApp, un correo electrónico, llamadas, etc. Entonces también tenemos muchos delitos incluso contra la intimidad en el ámbito de la violencia de género.
- En cuanto al de mayor impacto, la estafa, ¿preocupa especialmente en Cádiz? Se están dando muchas investigaciones y casos que tienen aquí su epicentro con bandas organizadas...
- Sí, ahora hemos tenido operaciones que vienen las unidades centrales de Madrid porque son ya estafa de toda España. El volumen que hay es muy alto.
- ¿Estafas ya dirigidas por grupos organizados?
- Sí, grupos criminales que a lo mejor a través de Telegram empiezan a aprender el tema. Es que incluso hay tutoriales de cómo estafar y se los pasan. Cuando empezó, a lo mejor utilizaban las plataformas de anuncios que había y ofertaban una moto que era mentira o un alquiler vacacional, que aquí en Cádiz se daba mucho. Pero de esas primeras que hubo hemos pasado en poco tiempo a gente que es capaz de realizar paneles bancarios, es decir, simular dominios y la interfaz de la banca online. Consiguen meterse con los programas de ordenador a manejar las cadenas de mensajes de seguridad y se hacen con las claves. Después para la validación llaman al mismo tiempo haciéndose pasar por el banco para que les den los datos que les faltan. Todo una mecánica.
- ¿Y así son la mayoría de casos que se están dando en la provincia?, ¿de cuánto dinero o víctimas podemos estar hablando?
- Pues millones de euros, sumando todo... no me he parado a hacer la cuenta, pero le diría que sólo en la provincia bastantes millones de euros. En poco tiempo, además. Todo el mundo recibe ya en sus móviles mensajes de envíos falsos con enlaces maliciosos, correos, bizum inverso, hay de todo. Por ejemplo, antes se hacían pasar por ofertadores de productos que eran falsos y ahora por potenciales compradores, mandan la señal y lo que envían es realmente el bizum pero para que se les admita un cobro.
- Pero, ¿qué hace que la gente caiga una y otra vez?
- Los nervios de la venta o personas mayores que no se paran a leer bien los mensajes. Se creen que están aceptando el bizum y lo que están haciendo es aceptar dar ese dinero al otro sujeto. También hay grupos que dan a todos los palos.

El caso de San Fernando: «De las últimas causas, ninguno de los investigados supera los 30 años»
- ¿No cree que el incremento de este tipo de delitos se nota en que han podido disminuir otros robos comunes, los que antes se daban en la calle: hurtos, atracos, cajeros, alunizajes...?
- Sí, claro. Antes un ladrón se jugaba en la calle el ser identificado o que lo cogiera la Policía en un tirón, en un atraco, con un arma... ahora desde el salón de su casa, viendo un partido de fútbol o jugando a la Playstation, en pijama y pantuflas, puede cometer delitos que además son mucho más lucrativos. El que va por un bolso no sabe lo que hay dentro, el que roba por internet ya sabe la cantidad.
- Y ¿qué está pasando en San Fernando? Desde una primera gran operación que hubo en 2019, 'operación Ruder', no dejan de sucederse casos, investigados, detenidos por este tipo de estafas. Bandas criminales que parece que se están criando en eso...
- Pues desde las primeras causas ya colaboraban menores y puede ser que fueran aprendiendo ese 'oficio'. De las últimas que hemos tenido nadie tiene más de 30 años. Se han ido perfeccionando, han visto que es un negocio muy lucrativo y el boca a boca lo ha extendido. Además la reincidencia es también preocupante. Pero ha habido avances penales. Y también en la colaboración con las unidades especiales de la Policía Nacional y la Guardia Civil. Además ha sido clave la unificación de delitos en una misma causa para que no sólo se enfrenten por una a hurtos, sino que se les acumulen todos los fraudes cometidos y sean enjuiciados por ello.
Pornografía infantil, el engaño por redes
- Dejando al margen los casos de estafas dice que le preocupa especialmente las causas que les llegan relativas a la pornografía infantil a través de internet o redes sociales...
Sí, especialmente, porque las víctimas son menores, son muy vulnerables, siempre me sobrecoge. No controlo otras provincias pero sí sé que hay una incidencia importante en Cádiz. Además tengo la sospecha de que hay muchos delitos sexuales cometidos contra menores que no se denuncian. No sé si porque el niño no lo termina de contar o porque cuando lo hace el padre prefiere hacer borrón y cuenta nueva. En cuanto a estos procedimientos, en los diez años que llevo, la incidencia se ha disparado. Puede ser un 50 por ciento más de asuntos. O incluso más.
Me refiero por ejemplo a casos de niños que son engañados pensando que hablan con alguien y en realidad es un adulto, un pederasta, y le envían fotos o vídeos, o incluso consiguen quedar con ellos para consumar actos sexuales tras esa primera relación en el entorno tecnológico.
- En estos casos, la dependencia de esos menores a las redes sociales, su exhibición, esa persistencia... ¿es la peor de las amenazas?
- Sí, es un gol que nos han colado a la sociedad. En muy poco tiempo hemos pasado de tener un móvil porque era algo cómodo y se usaba para poder llamar desde cualquier sitio, a llevar encima no solo teléfonos, sino dispositivos informáticos integrales. ¿Y cuál es el problema? Que a lo mejor hemos facilitado esos equipos a la infancia muy pronto y sin ningún control ni conciencia de los peligros a los que se enfrentan cuando están navegando por internet. Es fácil. A todos nos preocupa cuando nuestros hijos van por ejemplo a la feria a ver dónde están o con quién se juntan, qué beben, por dónde vuelven a casa, etc... pero, sin embargo, ahora les damos un móvil y un acceso a internet y nos despreocupamos totalmente porque lo tenemos ahí, en pijama en el sofá de casa... pero a lo mejor ese niño que está en pijama en el sofá está sufriendo un acoso, un delito contra la intimidad, un bullying, una agresión sexual, una estafa, mil posibilidades delictivas que están pasando y que no estamos siendo conscientes. A lo mejor por falta de educación.
- Y ahora llega la inteligencia artificial... ¿cómo depara ese futuro en estas circunstancias?
- Peligroso. Muy peligroso. No quiero ser pesimista, ojalá que no, pero es que vamos siempre por detrás. Es decir, ahora se están planteando en el Congreso aprobar leyes que regulen el uso de los móviles en menores, ¿por qué no antes? Parece que tenemos que esperar a que se desmadre la situación para intentar poner parches.
- Como dice, son conductas ya asumidas y nuevos lenguajes de comunicación y de relacionarse. Como fiscal delegado en este área, ¿qué le diría a los padres sobre la forma de gestionar ese control?
- Que es una labor educativa pero no solo de los padres, que por supuesto, sino de los centros escolares e incluso de los medios de comunicación. Creo que faltan campañas sobre estos peligros. Como las que se hacen sobre temas de violencia de género, en seguridad vial, en sexo seguro... campañas en los colegios donde les hablen de casos de niños de su edad que han sufrido estas cosas y vean lo que implica el uso de estas tecnologías de una manera discriminada y sin control, que se desvirtualice, casos reales. Educar, enseñar, advertir, luego ya cada uno tendrá que ver dónde entra pero creo que hay que intentar manejar ese descontrol.
La necesidad de la especialización en los juzgados
- Comenzó hace diez años en esta especialidad y ahora en el área de Cádiz son tres. También se han especializado en la Policía Nacional y en la Guardia Civil con equipos concretos para luchar contra la criminalidad informática, ¿qué echa en falta para poder asumir tal cantidad de casos?
-Cierto. Hay cuerpos especializados de Policía y Guardia Civil con quienes trabajamos mano a mano, hay fiscales especializados. Echo en falta que haya, por el volumen que esto tiene y el que tendrá, juzgados o jueces expertos en la materia. Me ayudaría mucho. No quiero compararlo con la violencia machista ni mucho menos, pero ya se consiguió que hubiera un juzgado especializado en la materia por el alcance que tenía, ¿no? También hay mucho narcotráfico y no se ha hecho un juzgado especializado, pero a lo mejor los tipos o la manera de investigar de esos delitos están más al alcance de cualquier juzgador. Sin embargo, esta actividad requiere un nivel más experto, que ni yo a veces consigo tenerlo. Son cosas de ingeniería muchas veces y cada vez más sofisticadas.
Con este panorama y con su experiencia y visión global, ¿qué consejo daría?
- Que no se fíen. Nos fiamos demasiado de un móvil. Que ante cualquier duda acuda al sitio o llame por teléfono. Y también que sean conscientes de que ahora se está expuesto a cualquier cosa. Descargas, redes, webs... así que quizá es mejor para realizar ese tipo de gestiones utilizar dispositivos que estén limpios y con los que no se navegue habitualmente. Toda precaución es poca.