El Puerto
Eduardo Osborne presenta la conexión entre el mundo taurino y la música pop
El Club El Buzo acogió una conferencia donde el escritor explicó los entresijos de su libro 'La música cantada del toreo: La tauromaquia en la cultura pop', comentando la unión tan extraña que existe entre el toreo y la música pop
Eduardo Osborne es de la Hermandad de Los Panaderos y fiel seguidor del Sevilla F.C., pero también es aficionado de mundo de la tauromaquia. En su coloquio en el Club El Buzo ha capoteado desde Elvis Presley a Rosalía, haciendo un estudio sobre la pervivencia de lo taurino a través de la canción y las expresiones de la cultura pop. Su libro 'La música cantada del toreo: La tauromaquia en la cultura pop' es un estudio muy atractivo sobre las claves de lo taurino en el mundo pop anglosajón e hispanoamericano, con nombres desde Kennedy y los Beatles hasta Madonna, Metallica, desde Picasso o Manuel Alejandro a la Movida, Sabina, José María Cano o Rosalía. Dejando una pregunta antes de comenzar. ¿Comparten el pop y lo taurino una raíz común como culturas populares modernas?
Sobre el torero opina que «la profesión del torero es la más difícil que hay, ya que muchas veces necesitan y les hace falta que se den diferentes circunstancias que aunadas conforman un verdadero profesional». Su libro ha sido editado en la editorial El Paseillo, algo que al autor le hace mucha ilusión puesto que «la industria siempre pone muchas pegas a los temas taurinos y, sin embargo, esta editorial está creada para ello y se ha convertido en un referente del mundo del toro».
«La gente se sorprende con el nombre del libro, ya que el toro siempre ha estado vinculada al flamenco y la copla dadas las relaciones personales entre maestros del toreo con flamencas o coplistas». Pero por ello ha sacado este libro, para conseguir dar visibilidad a la vinculación del toreo con músicas más modernas. «El primer sorprendido fui yo», afirma Eduardo Osborne.
Durante su coloquio ha explicado diferentes ejemplos de cantantes que han lanzado un guiño a la fiesta de los toros. De Sabina le interesaba, más que su afición al toro, las metáforas taurinas y lo giros en sus letras dedicados al mundo taurino. «Si uno se va a su discografía desde los 80 hasta hoy, en todas sus canciones hay un guiño al toreo». De Andrés Calamaro destaca su defensa a esta fiesta y exposición hacía el público.
Elvis tiene tema taurino en el que aparece el artista vestido de corto cantando un tema taurino rodeado de guiños mexicanos, mezclando ambas culturas. «Esta canción está cantando en inglés, pero la referencia al toro está hecha en español». Incluso el grupo Metálica encargó un cartel taurino cuando fue a Madrid. «Era un torero rockero tatuado y por ello recibió muchas críticas de los antitaurinos. Pero pese a las críticas el mismo grupo defiende que ha sido el mejor cartel que han tenido».
Madonna, por su parte, tiene varios ejemplos. Uno es un video taurino posterior que es muy impactante. Un video donde aparece un torero lidiador que conquista a la fan, creando la típica escena del «torero conquistador». En el otro video, Madonna mete el tema del toro como elemento mitológico. Loquillo también ha sido un hombre muy defensor de la fiesta y muchas veces recuerda ir a la plaza de toros.
«Me fui encontrando con un material que desconocía y comencé a ordenarlo por autores, historias y anécdotas». Conforme avanzaba le surgió la duda de si meter o no temas antitaurinos. «Al principio no lo metí. Algunos amigos decían que no y otros decían que sí. Pero pensé ¿Por qué no? Y al final lo metí porque no lo consideraba significativo ni relevante». Amaral es un ejemplo de ello junto a otros grupos de música vascos. «Hay grupos que usan la fiesta para criticar a España». Otra razón que le hizo incluirlo que se considera más intelectualmente honesto metiéndolo. Y, por último, porque el antitaurino no deja de estar fuera de la fiesta. «Pienso que los antitaurinos siempre estarán y que no le quitan valor a la fiesta, sino que igual refuerza nuestro apoyo».
Eduardo Osborne se preguntaba por qué un arte tan arraigado a las costumbres populares del pueblo invade los terrenos del pop. Para responder estas preguntas el escritor parte de los rasgos identificativos del pop, un movimiento popular donde lo cotidiano se sublima y pasa a ser arte. «Va contra las culturas clásicas dominantes hasta entonces. ¿Hay un arte más cromático que la plaza de toros? ¿Algún icono popular mejor para definir nuestra condición milenaria? ¿Algo más conocido que el toro de Osborne coronando una carretera desde cualquier punto de la geografía? ¿Hay un lenguaje más eficaz que el rito de la vida frente a la muerte? ¿Hay algún sitio donde sea mejor tratado el estatus social?». Preguntas que son respondidas con ejemplos.
Y terminaba la conferencia afirmando que prefiere la defensa del toreo desde el punto de vista ético y cultural. «Es española, universal, abierta, transversal, culta y debe ser una fiesta viva. Espero contribuir con este libro a que esto se vea un poquito más claro».
