Manuel Reina, apostado a las puertas de los juzgados / L.M.
Manuel Reina, apostado a las puertas de los juzgados / L.M.
Dos Hermanas

«Solamente pido igualdad para estar más tiempo con mis hijas»

Un padre inicia una protesta en los juzgados para pedir la custodia compartida

Dos Hermanas Actualizado: Guardar
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Manuel Reina Medina es un padre divorciado de Dos Hermanas que acaba de emprender su particular lucha para lograr la custodia compartida de sus dos hijas, de 13 y 9 años. Desde el pasado martes se mantiene apostado a las puertas de los juzgados del municipio nazareno durante todo el día, protagonizando una huelga de hambre con la que busca «llamar la atención y sensibilizar» a la sociedad de la situación por la que pasan tanto él como otros padres divorciados que quieren disfrutar y pasar más tiempo con sus hijos.  

En este caso concreto de Dos Hermanas, la sentencia de divorcio emitida por el juez el pasado mes de julio estipuló que, a partir de septiembre, las menores estarían con su padre dos fines de semana alternos al mes y la tarde de los miércoles durante unas cuatro horas.

Una decisión judicial que ha sentado como un jarro de agua fría en el entorno de Manuel, que ya solicitó en el juicio la custodia compartida.

«Solamente pido igualdad, no quiero en ningún momento que perjudiquen a la madre, lo único que deseo es estar más tiempo con mis hijas», asegura este hombre, que cuenta con el apoyo que le brinda la plataforma Custodia Compartida de Sevilla, Málaga y Madrid en su protesta ante los juzgados, para la cual también está recogiendo firmas, con el fin de solicitar al Estado «una ley con la que los padres tengamos el mismo derecho que las madres».

Antes de acudir a la justicia, este padre de Dos Hermanas mantenía desde que se separó de la madre de las menores -hace ahora casi tres años-, un «acuerdo» en el que estaba fijado que Manuel podría estar con sus hijas dos fines de semana al mes y la tarde y noche del miércoles, de forma que él las llevaba al colegio el jueves por la mañana. Sin embargo, ahora la situación ha empeorado para este padre, puesto que las menores ya no pernoctan en su casa entre semana.

Distancia

Según explica, el juez ha tenido en cuenta la distancia y basa su fallo, fundamentalmente, en el hecho de que se haya marchado a vivir a Sevilla capital y no resida ya en Dos Hermanas, donde las pequeñas están asentadas y acuden al colegio. De hecho, la sentencia considera «perjudicial» que el padre viva en la capital hispalense, ya que las pequeñas tienen horarios de entrada y salida en sus centros escolares distintos y supondría que una de ellas tuviera que «esperar todos los días» con su padre hasta que llegara su hora de entrada. 

De su lado, Manuel argumenta que al ser autónomo –dirige una empresa de mármoles- tiene mejor «facilidad de horarios» para poder adaptarse a las necesidades de sus hijas y defiende que desde su nuevo domicilio en Sevilla hasta Dos Hermanas «no se tarda una hora, como dice el juez, sino que no son más de 20 o 25 minutos porque no hay que coger ningún semáforo, ya que vivo en el extrarradio». Ante esta situación, este padre ya ha anunciado que estaría dispuesto a volver a vivir en Dos Hermanas, si así consigue la custodia compartida de sus hijas.

«No me siento en igualdad de condiciones, tampoco he pedido nada material, únicamente poder compartir más tiempo con mis hijas», insiste. El fallo judicial ya ha sido recurrido por este padre y será ahora la Audiencia Provincial de Sevilla la que lo resuelva. Por el momento, asegura que continuará cada día a las puertas de los juzgados y con su huelga de hambre «hasta que el cuerpo me aguante».

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