CHICLANA

Chiclana inicia una campaña para alertar a los jóvenes de los peligros del consumo de gas de la risa

El Ayuntamiento junto a Nueva Luz tratarán de advertir de las consecuencias a los más jóvenes ante la rápida expansión de su consumo

L.V.

Chiclana ha comenzado una campaña contra el consumo de óxido nitroso, más comúnmente conocido como gas de la risa.

Se trata de un gas con propiedades anestésicas, analgésicas y disociativas, incoloro y con un ligero olor dulce. Los efectos se producen en menos de un minuto y tienen una duración máxima de entre uno y cinco minutos, dependiendo de la dosis inhalada. Se desconoce qué dosis causa toxicidad crónica y provoca adormecimiento corporal, sensación de mareo, desorientación, dolor de cabeza y sensación generalizada de hormigueo.

Además, la administración directa desde la cápsula puede causar quemaduras graves en las vías respiratorias. Algunos de los efectos se deben a la hipoxia causada por una falta temporal de oxígeno, que también puede provocar convulsiones.

«Vamos a llevar a cabo una campaña en medios de comunicación y centros educativos para concienciar a la ciudadanía de los riesgos que entrañan estas nuevas prácticas cada vez más extendidas entre la población chiclanera», ha comentado Guillermo Sierra.

Consumo extendido entre jóvenes

Por su parte, Fede Díaz ha indicado que «somos conscientes de que el consumo del gas de la risa se está extendiendo entre los jóvenes de Chiclana de una forma peligrosa, puesto que cada vez son más los jóvenes y a una menor edad los que se están apuntando a esta 'moda', pese a su peligrosidad». «Por eso, hacemos un llamamiento a los jóvenes de Chiclana para que no caigan en la tentación y actúen de forma responsable, puesto que puede ser peligroso para su salud, con consecuencias que pueden llegar a ser graves», ha comentado el delegado de Juventud, quien también ha hecho un llamamiento a las familias para que actúen rápidamente y, si es necesario, se pongan en contacto con el Ayuntamiento o con la coordinadora Nueva Luz, que sabrán perfectamente cómo actuar en estos casos».

«No se trata de ninguna broma, sino que es algo muy serio y en lo que vamos a trabajar para que el ocio juvenil no llegue a estos términos. De ahí que desde Juventud apostamos por un ocio alternativo y libre de drogas, con actividades para el disfrute de una forma sana», ha explicado.

Trabajo de prevención

Asimismo, Paqui Guerrero ha resaltado que «esta campaña no sería posible sin el convenio firmado con el Ayuntamiento de Chiclana, que nos respalda en las acciones que llevamos a cabo, gracias a la sensibilidad que tiene para tratar todos estos temas importantes para la ciudad de Chiclana». «Nuestra idea no es alertar, sino informar y formar a la ciudadanía de las consecuencias de esta práctica. Así, trabajamos en la prevención, pero también en la rehabilitación social», ha indicado la presidenta de Nueva Luz, quien ha aclarado que «el óxido nitroso es un gas que se lleva utilizando muchos años en anestesia por personal formado, así como en alimentación o mecánica, pero ahora está de moda entre los jóvenes».

«Dependiendo de la inhalación de este gas, puede llegar a los pulmones y provocar convulsiones o que la persona se desmaye», ha explicado Guerrero, quien ha insistido en que «no es un broma, sino algo muy serio. Por ello, queremos concienciar a la juventud y a las familias de las consecuencias que puede tener el consumo de este gas, que en otros países está provocando adicciones».

Finalmente, Carmen Grajales, trabajadora social que imparte cursos y charlas en centros educativos de Secundaria, ha indicado que «el óxido nitroso es coloquialmente conocido como gas de la risa porque provoca euforia y risa, al igual que sucede con el alcohol, aunque más limitado en el tiempo». «Al principio, se controla el uso de este gas, pero poco a poco se va convirtiendo en una adicción, tal y como hemos visto en países como Alemania o Polonia», ha indicado la trabajadora social, quien ha aclarado que «legalmente no se puede utilizar de forma habitual este gas, pero sí está permitida su venta, aunque es bastante caro».

Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia