La partida de la Princesa Leonor a bordo del Juan Sebastián de Elcano despertó una gran expectación. Todos los movimientos de los guardiamarinas durante esos días fueron seguidos y analizados al milímetro. Entre ellos, el traslado de la Virgen a bordo del buque escuela justo antes de que iniciaran la travesía.
Pues bien, esa imagen es la de la Virgen del Rosario, patrona de Cádiz y que cuenta con una gran devoción en la ciudad. Esta talla, conocida como la Galeona, acompaña a la tripulación del Elcano en cada una de sus travesías.
La imagen, que también es símbolo de la tradición naval, tiene una peculiar historia y así es recordada. Esta Virgen que se venera en el Convento de Santo Domingo de Cádiz ha sido testigo de numerosas travesías. Aunque actualmente se utiliza una réplica para proteger la original, conserva en su interior restos de la madera quemada en el incendio de 1931, cuando la iglesia de Santo Domingo fue asaltada. La imagen quedó muy deteriorada y se salvó solamente la cabeza de la Virgen y el Niño al completo.
Cientos de embarcaciones se unen al adiós del buque escuela con la Princesa Leonor a bordo y sus padres, los Reyes Felipe VI y Letizia, desde el buque de la Armada Vigía
En 1945 fue reconstruida y debido a su vuelta al culto se realizaron ya algunas salidas en barco por la Bahía de Cádiz.
Esta tradición continúa cada año en el crucero de instrucción del Juan Sebastián de Elcano. Este pasado 11 de enero se pudo ver como los guardiamarinas -con la Princesa Leonor entre ellos- entraron en formación en la Iglesia Conventual de Santo Domingo para celebrar la Eucaristía de despedida antes de comenzar su viaje y para el embarque trasladaron a la imagen junto a ellos.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión