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Los nuevos objetivos científicos del 'Elcano' como observatorio permanente del cambio climático
El buque escuela de la Armada, el Instituto Hidrográfico de la Marina y la Universidad de Cádiz mantendrán los trabajos de investigación durante el 96 crucero de instrucción del navío
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El buque escuela 'Juan Sebastián de Elcano', el Instituto Hidrográfico de la Marina (IHM) y la Universidad de Cádiz (UCA) mantendrán los trabajos de investigación sobre el cambio climático durante el 96 crucero de instrucción del navío de la Armada, que se iniciará el próximo 13 de enero desde el Puerto de Cádiz y finalizará el 21 de julio.
Este proyecto como observatorio permanente, enmarcado dentro del Decenio de las Ciencias Oceánicas para el desarrollo sostenible proclamado por la Unesco para el decenio 2021-2030, da continuidad desde 2023 al denominado 'Proyecto bandera 1519', proyecto piloto que tuvo lugar entre 2019 y 2022 con motivo del V Centenario de la primera circunnavegación, ha indicado la Armada en una nota.
Así, este será el cuarto año que el buque escuela de la Armada se convertirá en un observatorio permanente del cambio climático, en el que colaborarán científicos de la UCA, personal del IHM así como la dotación y los guardiamarinas que se forman en este navío.
Los detalles de la continuidad de este proyecto se han dado a conocer este lunes en una rueda de prensa que ha estado presidida por el comandante director del IHM, el capitán de navío Salvador Espinosa González-Llanos, acompañado por el comandante del buque escuela, el capitán de navío Luis Carreras-Presas Do Campo, y el catedrático de la UCA Miguel Bruno Mejías.
Durante la presentación Espinosa ha destacado un año más el hecho de «convertir el buque escuela Juan Sebastián de Elcano en un observatorio permanente». «Forma parte desde hace unos años de un programa de la UNESCO con el objetivo de apoyar los esfuerzos encaminados a revertir el ciclo de disminución de la salud de los océanos y la creación de mejores condiciones para el desarrollo sostenible de los mismos».
Se han presentado las actividades científicas que se llevarán a cabo durante el próximo Crucero de Instrucción del Juan Sebastián de Elcano así como un repaso a las actividades desarrolladas en la última navegación del buque en la que se registraron datos relacionados con el estudio de la conservación y sostenibilidad de los mares.
Cabe recordar que en el pasado año 2023 el buque escuela siguió con las investigaciones y observaciones del proyecto 'Bandera 1519' con la observación de la estructura térmica del océano y el avistamiento e inventario de cetáceos para revertir el ciclo de disminución de la salud de los océanos y auspiciar la creación de mejores condiciones para su desarrollo sostenible.
En concreto, los estudios marinos que se llevaron a cabo durante las travesías oceánicas comprendían objetivos científicos específicos como el seguimiento de la variación de perfiles de la temperatura del mar en la zona ecuatorial del Atlántico y en el giro de corrientes subtropical del océano Atlántico, y se continuaba con el programa de avistamiento de cetáceos y la realización de pruebas con boyas de deriva de bajo coste con sensores que complementaban el banco de observaciones del observatorio permanente de años anteriores.
El anterior proyecto de esta índole, 'Bandera 1519', se planteó como una experiencia piloto que permitiría evaluar la viabilidad del buque escuela como observatorio científico permanente.
El proyecto se desarrolló durante los cruceros de instrucción que realizó el navío en los años 2021, que conmemoró el 500 aniversario de la expedición de Magallanes y Elcano, del 2022, con unos resultados científicos «altamente satisfactorios» para la observación de las variables oceánicas que habían sido consideradas y el pasado 2023.
Miguel Bruno Mejías, en palabras de Espinosa, ha dado «toda una clase magistral». Y el catedrático ha puesto el foco durante su disertación en los nuevos objetivos científicos del proyecto. Son cinco.
El primero de ellos es «continuar con el seguimiento de la variación de perfiles de temperatura en la zona ecuatorial del Atlántico y en el gripo de corrientes subtropical del Atlántico».
El segundo no es otro que hacer un «seguimiento de la biomasa de zooplanctonm profundidad de picnoclinas y caracterización de núcleos de corriente con sonda EK80 instalada en el buque».
El tercero, «continuar con el programa de avistamiento de cetáceos y elaboración de inventario correspondiente».
El cuarto es «realizar pruebas de boyas de deriva de bajo coste con sensores que complementen el banco de observaciones del Observatorio Permanente». Las boyas, ha resaltado Miguel Bruno, se fabrican en Cádiz.
Y, por último, pero no por ello menos importante, el quinto: «Aportar datos de profundidades de fondo marino al programa de Naciones Unidas Seabed2030».
«Este proyecto permanente», ha resumido el catedrático de la Universidad de Cádiz, «tendrá mayor valor científico, mejores conclusiones, dentro de diez años».
El programa de observaciones y mediciones a realizar en esta nueva navegación se complementará con otras nuevas técnicas como la medición de características oceánicas del Golfo de México.
UCA, Instituto Hidrográfico y Elcano
Para el análisis e interpretación de los datos, la Universidad de Cádiz dispone de la base de conocimiento necesaria que permitirá obtener conclusiones a partir de los datos obtenidos, así como mejorar y validar los modelos oceánicos globales.
La Universidad de Cádiz es un organismo de reconocido prestigio y está involucrada en proyectos de investigación relevantes en el ámbito marítimo. Además, su relación con el Campus de Excelencia Internacional Global del Mar (CEI·MAR), permiten contar con la experiencia de grupos de investigación de las diferentes universidades y centros que forman parte de este Campus.
Por tanto, la participación de la Universidad de Cádiz brinda el respaldo científico necesario para el adecuado planeamiento de la adquisición de los datos y su tratamiento, apoyándose en trabajos previos realizados por la comunidad científica y en líneas de trabajo abiertas que requieren de datos sistemáticos a nivel oceánico. Además, la cercanía de la UCA y del IHM a otras instituciones relacionadas con el conocimiento marino como el CEI·MAR, pudiera materializarse en ampliar esta colaboración y dar al proyecto un mayor respaldo institucional.
El Instituto Hidrográfico de la Marina, ubicado en la ciudad de Cádiz, es un centro de la Armada que realiza el apoyo que sea requerido para los intereses de la Armada y es el responsable además de elaborar y publicar la cartografía náutica básica del Estado. Por tanto, una de sus principales misiones es velar por la seguridad en la navegación y contribuir al desarrollo científico con el conocimiento del ámbito marítimo. Sus antecedentes se podrían remontar a la propia Casa de Contratación de Sevilla, donde se coordinaban las labores de elaboración y depósito de la cartografía náutica elaborada por los pilotos en las numerosas expediciones realizadas por la Armada.
El buque escuela 'Juan Sebastián Elcano' fue botado en Cádiz en el año 1927 y, desde entonces, cumple con eficacia su principal misión, que es la formación como marinos de los oficiales de la Armada, así como la representación de la Armada y del Estado, actuando como buque de apoyo a la política exterior del Estado, portando la insignia nacional en todos los países en los que recala, y recibiendo a bordo a diferentes autoridades y personalidades nacionales y extranjeras, ganándose el cariño y afecto de las gentes que lo visitan.
