Feijóo y Caballero normalizarán sus relaciones tras años de desencuentros

Tras años de desencuentros y mensajes mediáticos, vía titulares en prensa, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, parece que ahora si está abierto a la colaboración entre administraciones, la misma que lleva negándole a la ciudad desde que el Gobierno del PP tomó las riendas de la Xunta en 2009. Desde entonces el regidor aplicó la máxima de «o estás conmigo, o contra mí» con una clara perdedora; Vigo. Hoy son otros tiempos políticos, y tras su éxito en las urnas del pasado mes de mayo el regidor olívico, aunque sea solo en apariencia, parece haber aparcado la táctica de la confrontación que tantos réditos le ha valido.

Caballlero acude a su reunión de este lunes con el mandatario gallego en San Caetano «con ánimo de colaborar», así lo declaraba nada más trascender la fecha de la cita.

Sobre los temas a tratar prefirió guardar silencio porque, dijo, «todo lo que anticipe, diciendo tonos o formas, la dificultaría». De lo que no cabe duda es que son muchos los asuntos sobre los que hay que acercar posturas.

Eso sí, vayan por delante sus 17 concejales, el mejor de los resultados cosechados en Galicia. Y por si de esto quedase alguna duda, quien evita la polémica para no poner en riesgo el nombramiento de su mano derecha en la Diputación de Pontevedra,Carmela Silva, avisa: « Confío en que la Xunta y Feijóo hayan hecho la lectura de lo que dijo la ciudad de Vigo y en que todo vaya bien».

En este sentido, apenas avanzó que uno de los temas que pondrá sobre la mesa en su encuentro con el jefe del Ejecutivo autonómico será pedir para el aeropuerto de Vigo «el mismo apoyo que reciben las terminales de Santiago y La Coruña». Precisamente es Peinador el que abandera su guerra localista, pese a que los datos revelan que en el primer mandato de Feijóo, hasta que puso fin a las subvenciones a las aerolíneas, el aeródromo vigués recibió 3,72 millones en ayudas frente a los 3,57 de Alvedro. En este sentido, si hay una línea roja marcada por el presidente es su oposición a que «los municipios financien vuelos a destinos internacionales cuando esas mismas rutas se operan en otros aeropuertos sin ayudas».

Pero la carpeta de asuntos pendientes es mayor. El propio Caballero los anticipaba en una carta remitida a Feijóo con fecha 13 de julio. Entre ellos, la Ley del área metropolitana de la que se descolgó el Ayuntamiento y sobre la que pedirá cambios. «No puede ser muy sólida, si se paraliza solo porque no asista el alcalde de Vigo; el modelo a seguir es el de Barcelona», señalaba no hace mucho en una de sus intervenciones.

La situación del nuevo hospital, recién inaugurado y al que el gobierno local socialista dio la espalda desde el principio, se tratará en la cita, así como la Ciudad de la Justicia, durante años bloqueada por Caballero, los mismos que la Xunta la mantuvo consignada sin éxito y a la espera de las expropiaciones —ahora ya iniciadas—.

También abordarán, entre otras cuestiones, la política de acción cultural y social, la estación intermodal, los viales de titularidad autonómica, las becas de comedor en centros de educación infantil y primaria, las infraestructuras educativas, los planes de empleo y la plantación de un bosque.