La Torre Norte se podrá contemplar restaurada sin andamios en menos de un mes
La Torre Norte se podrá contemplar restaurada sin andamios en menos de un mes - M. Muñiz

Patrimonio decidirá cómo reconstruir el remate de la Torre Sur de la Catedral de Santiago

La opción de sustituir la vieja y deteriorada piedra de esta zona del santuario jacobeo por material nuevo, está sobre la mesa

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No está siendo fácil resolver cómo reconstruir el remate de la Torre Sur de la Catedral de Santiago y todavía restan escollos técnicos y burocráticos por solventar. Desde antes de empezar a intervenir sobre ella ya se conocía que la restauración de la segunda de las torres de la fachada del Obradoiro iba a ser la más problemática. Y así ha sido. Uno de sus achaques más graves es que el remate —en estos momentos desmontado para eliminar de su interior el hormigón añadido el siglo pasado— arrastra graves problemas estructurales. En algún momento de su historia, en la que ha sufrido varios derrumbes, la piedra se cambió por una con menor grosor del debido. En cambio, en la Torre Norte, su compañera de plaza, se mantuvo y no sufre ese defecto.

En estos días, los técnicos que trabajan en la recuperación de la basílica terminan de sopesar pros y contras de las diferentes alternativas antes de presentar un proyecto definitivo, posiblemente hacia mayo, a la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta. Será este organismo dependiente de la Consellería de Cultura el que tendrá que autorizar o declinar la propuesta que llegue desde el templo.

Entre ellas está, y no como una opción menor, la posibilidad de sustituir el viejo material que no garantiza la estabilidad por otro nuevo. También podría evaluarse la colocación de alguna estructura supletoria en el interior de la construcción, pero se deberán tener en cuenta aspectos como las filtraciones de agua, pues erradicar las humedades que perjudican al Pórtico de la Gloria es uno de los principales objetivos de toda la intervención.

Mientras tanto, prosigue la retirada del andamio de la Torre Norte, que se estima haya finalizado en unos veinte días. Es decir, que en menos de un mes se podrá ver el resultado con un renovado aspecto sin los habituales y nocivos musgos y líquenes. Otras obras están a la espera de que se materialice la inversión anunciada por el Gobierno.

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