Alemania culpa a los servicios de inteligencia de evaluar erróneamente la situación en Afganistán

El exjefe del BND, Gerhard Schindler, rechaza por su parte la pelota y alega que el poder judicial alemán pone trabas al servicio de inteligencia

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El Gobierno alemán está siendo sometido a muy duras críticas por su falsa valoración de la situación en Afganistán, que ha contribuido sin duda a agravar las consecuencias de la salida de las tropas internacionales. El ministro alemán de Exteriores, sin embargo, traslada esa responsabilidad a la evaluación incorrecta del Servicio Federal de Inteligencia (BND) , de la que se ha estado nutriendo la política exterior alemana. El exjefe del BND, Gerhard Schindler, rechaza por su parte la pelota y alega que el poder judicial alemán pone trabas al servicio de inteligencia y hace imposible que cumpla con su cometido.

El ministro de Exteriores, Heiko Maas, ha señalado al BND como fuente responsable de sus valoraciones incorrectas. «El BND obviamente ha hecho una evaluación incorrecta de la situación, al igual que otros servicios», ha apuntado en una entrevista, «las decisiones que se tomaron en base a estos informes erróneos se han tomado según nuestro leal saber y entender. No hay duda de que el resultado fue incorrecto, con consecuencias desastrosas. Los servicios secretos habían asumido a su vez evaluaciones incorrectas de otros y eso tiene que cambiar», ha exigido Maas. «En el futuro, los hallazgos de otros servicios deberían revisarse de nuevo de manera muy intensiva», ha sugerido.

Si bien los servicios de inteligencia alemanes guardan un disciplinado silencio después de estas críticas, el exjefe del BND, Gerhard Schindler, ha salido en defensa de la agencia y se ha quejado de obstáculos legales y burocráticos que dificultaban el trabajo. «Si colocas una piedra legal tras otra en el camino del BND cuando se trata de obtener información, no debe sorprenderse de los resultados subóptimos en la evaluación», ha declarado al semanario Focus. Por ejemplo, según Schindler, el BND no está autorizado a «introducir de contrabando informantes reclutados en una organización terrorista porque, según nuestro sistema legal, estaría sujeto a enjuiciamiento por incitación o complicidad». Y deduce que, si al servicio secreto exterior alemán ya no se le permite infiltrarse en el círculo íntimo de los talibanes a través de sus propias fuentes, tampoco recibirá ninguna información privilegiada importante. Debido a un fallo del Tribunal Constitucional Federal del pasado, los talibanes incluso están protegidos por la Ley Fundamental alemana, porque el artículo 10, que contiene el llamado secreto de las telecomunicaciones, debe aplicarse a todas las personas de este mundo, incluidos los terroristas extranjeros en Afganistán. En mayo de 2020, a través de esta sentencia, el Tribunal Constitucional Federal prohibió al BND determinadas prácticas en el exterior. Los jueces de Karlsruhe decidieron que en lugares como Afganistán también se debe preservar el secreto de las telecomunicaciones y la libertad de prensa.

El caso es que, al ser interrogado por el Bundestag, el Servicio Federal de Inteligencia admite que calculó mal la situación en Kabul. Todavía el 13 de agosto asumía que pasarían semanas antes de que los talibanes invadieran la capital afgana . «Según un informe de situación, los islamistas actualmente no están interesados en un avance, también carecen de los medios militares para hacerlo. Una adquisición de Kabul en un futuro próximo es bastante improbable», fue la información que recibió el ministro de Exteriores . Al día siguiente, los talibanes rodearon Kabul y solo veinticuatro horas después lanzaron el exitoso ataque a la capital. Irrumpieron en el palacio presidencial ypublicaron fotos del triunfo en las redes sociales. A puerta cerrada, representantes del BND y del gobierno tuvieron que responder ayer a preguntas de los miembros de una Comisión de Control Parlamentario (PKGr) . Según ha informado el diario 'Die Welt', en esa sesión quedó claro no fue solo un fallo del Servicio Federal de Inteligencia. «Obviamente, también se cometieron graves errores al evaluar la información recopilada y al elegir las siguientes medidas». Según información de 'Die Welt', representantes del Servicio Federal de Inteligencia admiten abiertamente su participación en el error de juicio de la situación en varias reuniones con parlamentarios esta semana. «No lo vimos», es lo que reconocen, en un contexto de campaña electoral en el que la responsabilidad del ministro Maas, socialdemócrata, recae sobre el SPD y la del BND sobre la CDU, porque es competencia de la Cancillería y del Ministerio de Interior.

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