Hollande durante un encuentro con estudiantes en París este miércoles
Hollande durante un encuentro con estudiantes en París este miércoles - reuters

Hollande y Ségolène reconstruyen su pareja (política)

El presidente acoge a la actriz Julie Gayet en el Elíseo mientras la madre de sus cuatro hijos gana poder en el Gobierno

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François Hollande tiene dos grandes amores, Julie Gayet (en el lecho) y Ségolène Royal (en el consejo de ministros). Solo hay algunas fotos robadas de la intimidad amorosa del presidente y la actriz. Esas imágenes hablan de una inconclusa historia de amor.

Hay muchas fotos recientes y oficiales de la intimidad política del presidente y la madre de sus cuatro hijos, ministra de la Ecología, la política más ambiciosa de Francia, con mucho.

Históricamente, la pareja Hollande–Royal cohabitaron durante más de treinta años. El joven político ambicioso nunca deseó contraer matrimonio. Pero juntos, en pareja, hicieron una feliz e inconclusa carrera política.

Sarkozy derrotó a Ségolène en las presidenciales del 2007. El mismo año que Hollande abandonó el lecho de la madre de sus cuatro hijos, para largarse con Valérie Trierweiler.

Revelados los amoríos del presidente con Julie Gayet, el mes de enero de 2014, Trierweiler abandonó el Elíseo. Apenas tres meses más tarde, Ségolène volvió al palacio presidencial como ministra de la Ecología.

La pareja política Hollande–Ségolène se ha reconstruido en los últimos trece meses. Humillada el 2007, desterrada el 2012, Ségolène ha reconquistado el corazón político del padre de sus cuatro hijos.

Cocodrilos políticos

Las fotos oficiales del último trimestre lo prueban. En el consejo de ministros, la madre de los cuatro hijos de Hollande se sienta a la derecha del jefe del Estado. La pareja se entiende con una simple mirada cómplice. Ségolène ha acompañado al presidente en numerosos viajes oficiales. Y las fotos son muy elocuentes. La antigua pareja de jóvenes ambiciosos, fotografiándose con sus cuatro hijos para hacer política moderna, hace treinta años, se ha transformado en una pareja de curtidos cocodrilos políticos, con intactas ambiciones.

Hollande cuenta con Ségolène para integrarla, de alguna manera, en el dispositivo emergente de su futura campaña presidencial. Ségolène no oculta su condición de vicepresidenta, vestida con la gracia de las señoras de provincias tan del agrado de los sexagenarios en flor.

¿Cuál será el papel de Julie Gayet en los proyectos políticos de Hollande? Veremos.

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