Linda Evangelista enseña por primera vez su cuerpo tras quedar «desfigurada»

Claudia Schiffer, Cindy Crawford, Naomi Campbell y Linda Evangelista, de 56 años , fueron en los años 90 las grandes protagonistas no solo de las pasarelas sino de las portadas de las revistas de todo el mundo. Consideradas las primeras 'influencers' de la historia, su vida era seguida al minuto. Si las tres primeras siguen acaparando el foco de interés, la cuarta lleva desaparecida desde hace más de cuatro años. En septiembre de 2017 se publicaba la última fotografía de Linda Evangelista, desde entonces ni rastro de la modelo hasta el pasado mes de septiembre cuando la canadiense salió a sus redes sociales para explicar que un tratamiento estético la había dejado «brutalmente desfigurada» y presentaba una demanda contra la empresa de cirugía estética responsable. Como consecuencia del tratamiento estético Linda Evangelista caía en una profunda depresión que la recluía durante cuatro años.

Esta semana la revista 'People' publica una entrevista en la que habla abiertamente sobre el dolor emocional y físico que ha ensombrecido su vida en los últimos años después de haberse sometido a CoolSculpting , un popular procedimiento de congelación de grasa aprobado por la FDA que ha sido promovido como una alternativa no invasiva a la liposucción pero que a la modelo la dejó «permanentemente deformada» y «brutalmente desfigurada», según sus propias palabras.

En la publicación Evangelista afirma: «Me encantaba estar en la pasarela. Ahora temo encontrarme con alguien conocido» y añade «ya no puedo vivir así, escondida y avergonzada. Simplemente no podría vivir más con este dolor».

'People' publica que tres meses después de los tratamientos estéticos de Evangelista, la modelo comenzó a notar protuberancias en la barbilla, los muslos y el área del sujetador. Las mismas zonas que había querido reducir estaban creciendo y endureciéndose. Más tarde se entumecieron. «Traté de arreglarlo yo misma, pensando que estaba haciendo algo mal» afirma la 'top model', y empezó a hacer dieta y más ejercicio. «Llegué a un punto en el que no comía nada. Pensé que estaba perdiendo la cabeza».

Finalmente acudió a su médico: «Estaba llorando y le dije: 'No he comido, me muero de hambre. ¿Qué estoy haciendo mal?'». El médico le diagnosticó 'hiperplasia adiposa paradójica' (HAP). «Yo le dije, '¿Qué diablos es eso?' Y me contestó que ninguna dieta ni cantidad de ejercicio iba a solucionarlo».

Contando su historia Linda Evangelista trata de recuperar la confianza en sí misma: «Siempre supe que envejecería. Pero no pensé que me vería así», «no me reconozco físicamente, pero tampoco me reconozco como Linda Evangelista, la supermodelo». Simplemente la top «se ha ido».